RESEÑA,
1987
NUM, 175,
PP. 12 -13 |
EL/
LA GRAN PAVLOSKY
EL TRAVESTISMO AL TEATRO,
CON AMOR
En 1987
Pavlosky volvía con
Este es mi lugar. Ya era muy popular en España y su diva
la Gran Pavlosky todo un mito. Con motivo de ese espectáculo la revista
Reseña lo entrevistaba para conocer más cerca al personaje que se ocultaba bajo
aquellas pestañas de terciopelo.
PEDRO
ALMODÓVAR
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FOTO: J. R. DÍAZ SANDE (1987) |
Hijo de "un pueblito guapo, sin asfalto, con
chismorreos de barrio, teatro de tanto en tanto y con el cine y el baile como
única diversión" Ángel
Pavlovsky es, ya, un caleidoscopio en el escenario y en su vida, La
conversación gira en tomo a variados temas y uno no acierta a saber cuándo
habla Ángel o cuándo interviene "
la Gran Estrella
Pavlovsky, la loca entre las locas", Ángel nació hace 46 años en Rivera, un pueblecito de 4.000
habitantes, a
600 Km,
de Buenos Aires, La "loca Pavlovsky" nació en Rusia.
-¿Que
no hay locas en Rusia? Así - y junta sus dedos en pirámide y acentúa
su morrito de piñón-, Viven muertas de frío las pobres, pero las hay.
Los
ancestros rusos de Ángel Pavlovsky
proceden de sus abuelos y padres, emigrantes de Ucrania a
Argentina
con motivo de
la Revolución de
Octubre, De aquellos parajes recuerda el idioma de sus tíos, a imagen de unos
abuelos, muy rusos ellos, y, tal vez, el aguamar de las pupilas, De aquel
pueblito argentino sin tangos y de aquellos primeros 18 años de chico
estudioso y formal quedan unas frases: "No estaba mal. Era muy feliz pero intuía que fuera había
algo más”.
****
- El flujo y
reflujo del personaje al actor y del actor al personaje en las entrevistas,
sobre todo las televisadas, es una tónica frecuente.
- Sí, es un
juego difícil de explicar. Por eso digo que yo soy también esa gran
estrella. Hombre, yo no voy todos los días pintado y con los tacones y
demás, pero desde luego, ella no me traiciona ideológicamente. Lo que ella
dice es lo que yo pienso también. Ahí está la simbiosis. Cosas como el
machismo, la estupidez, la cursilería, la pedantería me molestan
bastante y, a través de su boca, arremeto contra ello.
- ¿Solamente
en eso está la simbiosis?
- Mira yo
reconozco que tengo muchas partes femeninas, No desconozco poseer cierta
ambigüedad. Esa ambigüedad que tiene ese ser real o irreal que es la
"Gran Pavlovsky", pues todo eso lo tengo yo.
-De la "Gran
Pavlovsky" existe un retrato loco, loco, más que el de "diva.....
- No es una
diva. Mi personaje es de una superestrella de esas que no tienen razón de
existir, pero que es como de clase obrera y por lo tanto oprimida, Las
divas son distintas, marcan sus límites. Yo, al contrario, me desnudo
totalmente para los espectadores. Me mezclo constantemente en el patio de
butacas, Me encanta que me pregunten, que me toquen, que me muerdan.
Esto es impensable para las divas. No saben lo que se pierden.
- De la "Gran
Pavlovsky" existe un retrato dialéctico: "es angelical y marginal,
absurda y generosa, impertinente y ocurrente, bonita y exigente bisexual y
carnal, bastante humilde y vanidosa".
§ Exacto.
- Cuando te
contemplé en Orquesta de Señoritas, me quedé sorprendido. Pensaba que
iba a ver un travestí más y lo que me fascinó es el juego de desdoblamiento
entre actor y personaje. Se me antojó un trabajo cubista; tres perspectivas de
un mismo ser: la loca Pavlovsky, la parodia de la gran estrella y el actor Ángel
Pavlovsky que arenga a un público. Había todo un trabajo de dirección. Esa era
la trampa.
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- No sé. No
podría teorizar sobre todo lo que has expresado, al menos de un modo tan
consciente, Es cierto que existen esas tres dimensiones que mencionas,
pero el proceso por el que he llegado a ello no podría intelectualizarlo,
ni definirlo. Puedo describirlo, eso sí.
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ORQUESTA DE SEÑORITAS
(1982)
|
- Pero tú ya eras
un actor con un bagaje teórico y práctico en el mundo de la interpretación.
- Sí. Había
aprendido todas las técnicas del mimo, Construí un espectáculo de mimo que
es con el que vine a España. Pero ya ahí, era un mimo heterodoxo. Introduje
"ballet" e incluso hablaba. Era un espectáculo muy libre y muy
abierto, Lleno de humor y ternura. Estuve muy enamorado de ese
espectáculo. Creí que nunca haría nada mejor. Ahora lo recuerdo con
cariño, pero con la distancia le veo muchos defectos.
- Tus ancestros
rusos proceden de tus abuelos y padres, emigrantes
de Ucrania, con motivo de
la Revolución...
- La
"loca" dice que no nació en Rusia.
- Vaya que si
nació, Lo que sucede es que la dejé hablar en Barcelona. Te explico y así
puedes hacerte idea y teorizar sobre lo que antes me has preguntado.
Todo es más sencillo. En 1973 nos presentamos mi hermana y yo en
Madrid en el Teatro
Alfil con ese
espectáculo de mimo, Aquello traía público pero no conseguía arrancar.
Después recorrimos los hoteles de
la Costa del Sol y el Levante español.
Salas de fiestas y demás. Para qué te voy a engañar. Aquello no
funcionaba. Subsistíamos solamente. Por aquel entonces iban naciendo los
"Gay-Club" con las imitaciones de los travestís. Me contratan
en Barcelona con mi espectáculo de mimo, para dignificar un poco el contenido
de aquellos espectáculos "gay", ya que se ponían un entredicho.
Yo era una especie de tapadera para engañar a la censura y a un
público más timorato. Pero me di cuenta de que cuando yo salía, había
como una ruptura con el público. Mi trabajo no tenía nada que ver con lo
que hacía Paco España (travestí del momento con gran éxito y gracia
en sus imitaciones y salidas de tono). Desentonaba ante el público y
defraudaba. Así que corto por lo sano, Aprendo a disfrazarme,
maquillarme, y comienzo a salir, Rompo con mi forma anterior, Pero no
hago imitaciones como es propio del mundo del travestismo. No las hago, no
por criterio, sino porque, sencillamente, no sé hacerlas. Salía a ver
qué pasaba en mi relación con el público, Decía espontáneamente los textos
que me salían al contactar con el público en temas o en inconveniencias
que ello" mismos provocaban. Es cuando me familiarizo con el mundo
del "cabaret" y me gusta.
- Y
aportas toda tu formación teatral antigua.
- Bueno, eso
está ahí y me imagino que sale. Lo que sí descubro es que en el mundo de
la improvisación caigo bien y consigo mantener con interés ciertos
"sketchs". Aquí es, posiblemente, donde nace el personaje
travestido, pero que al mismo tiempo se confunde conmigo mismo, ya que no
hago imitaciones. Me imito a mí mismo e incorporo mis ademanes, mi sensibilidad
a esa "loca" nacida en Barcelona de Noche, Ella dice lo que yo pienso y siento. El paso siguiente es el
teatro. Pienso que eso mismo se puede hacer en teatro y me lanzo a ello.
Así nace Orquesta de
Señoritas, un espectáculo maratoniano sin tiempo límite. Lo
fijaba el público.
Orquesta
de señoritas fue la gran revelación a nivel teatral. En
él, la "gran estrella" intentaba cantar una serie de canciones
acompañada por una decadente "orquesta
de señoritas", pero su deseo narcisista de contamos sus cosas,
sus diálogos continuos con el público segaban todo comienzo de canción.
- Mis
espectáculos no tienen como base la canción, aunque en principio lo
parezca. No tengo ningún talento musical y sólo en parodia se me tolera.
Mi personaje busca el coloquio continuo con el público. Mi personaje y
yo. Ahora teoriza todo esto como tú quieras. A veces me admiro de todas
las lecturas e interpretaciones que estudiosos y criticas han hecho de
mi obra. Lo que desde luego no se me oculta es que indudablemente pueden
existir muchas lecturas de lo que hago y digo.
- Me ha perecido
ver en Este es mi lugar un
espectáculo más cerrado, más terminado y más estético. Hay un buen juego de
luces y una atmósfera de "cabaret". Hay, te diría, una dirección y
una puesta en escena.
- Sí, es cierto.
Lo tengo más fijado. En cuanto al aspecto estético no me satisface
del todo. Las luces están bien, pero no es lo que pensaba y no se trata de
disculparme. El fenómeno imaginativo del teatro se queda siempre
abortado cuando te encuentras con las limitaciones materiales: dinero u
otros medios. Por eso he dicho muchas veces que mi mayor deseo es poder
crear en libertad y de ahí que sería ideal que volvieran a surgir los
mecenas. En este espectáculo voy de empresa, con todo lo que eso supone.
Todo el encanto del teatro se pierde cuando estás metido en estos asuntos.
Claro que si llegas a levantar el telón, la magia se produce y vuelves a amar el teatro.
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ESTE
ES MI LUGAR (1987) |
- En la
improvisación te juegas el que te puedan hundir el tiempo material del
espectáculo con las intervenciones del público.
- Cuento con ese
riesgo y me gusta. Es más, capitalizo las intervenciones espontáneas. Son
parte del espectáculo. Lo que tienes que hacer es que no te dominen. Ese
es el ingenio tuyo. No siempre aciertas, pero esa faceta es la que
descubrí en cualidad mía al principio, por eso me lancé.
- He comprobado
que, cuando se crea cierta tensión con un espectador, lo remedias por la línea
de la ternura, el afecto, la reconciliación. No intentas ser duro o
ridiculizarlo.
- Actualmente es
así. Hubo una época, en mis comienzos, que era más duro. Pero es que aquel
público era machista y fuertón. Iban a ver a un tío pintado o a reírse
del mariquita. Había que darles fuerte en la respuesta. Por otro lado
era una época en que me sucedía algo raro. Andaba como loco. Estaba más
loca de lo que soy. No me aguantaba nadie. Ahora trato de mantener un
diálogo. No se trata de ridiculizar a la persona o meterte con él sino
hablar con él. De todos modos el público siempre se azora y ahí es donde
tienes que tener tacto. El otro día, sin ir más lejos, tras mis primeras
intervenciones, vi que un matrimonio se marchaba. Probablemente no
sabían dónde se habían metido. Seria imprudente el meterme con ellos.
- Enfocas el
espectáculo como un acto de reconciliación, de amor.
- Teorizar no sé
y no me lo propongo en esos términos. Pero la interpretación que haces
puede valer. Lo que sí te puedo decir es que disfruto con el acercamiento
a través de la ternura. No se disfruta con el corte. El tema de la
reconciliación del que hablas, no lo promuevo sólo en el espectáculo, lo
busco en la vida misma. Busco el querer y que me quieran. Cuando veo un
actor del que me gusta su trabajo, le quiero. Son las reglas de la
teatralidad. Y es que el teatro, en cierto sentido, es un acto de amor.
- En tu espectáculo
hay como una llamada a las desinhibiciones. Pides a los espectadores que se
besen, se toquen, te muerdan y se muerdan. Todo eso suena a teorías terapeúticas
de grupo.
- No me lo propongo
así. Sería muy aburrido. Lo que hay en el fondo es el romper con un encerramiento
y un miedo al otro. El caso de la mordedura es más simple. Una vez una
señora en el espectáculo, me mordió. Y no sabía por qué. A partir
de ahí lo incorporé en el "show" y hago toda una puesta en
escena. Después he recapacitado y he visto que a la gente le gusta
morder. Todos mordemos por cariño o por furia.
- En Este es mi lugar hay un ramalazo pirandelliano en el personaje
que se niega a recitar los textos que le han escrito y así de texto cursi pasa
a un mano a mano en el habla.
- Sí, un guión.
- Te explico.
Algunos que hacen trabajos similares recopilan textos, "gags",
chistes". Yo prefiero comenzar por lo que se me ocurre. Rompo la barrera
con el público y pruebo en un diálogo a ver que pasa. Otras veces leo
poemas u otras cosas. De pronto encuentro un texto que me ilumina y lo
apunto. Trabajo solo. Después se presenta la dificultad de resolver los
cambios de vestuario sin que .se note la intervención del
"sketch" de entretenimiento.
La
Pavlovsky no se puede ausentar o no se debe notar.
Entonces se hace un juego, o un apagón de luz por avería u otro móvil...
Por eso no hay una puesta en escena real con una dirección de actores.
Más bien son amigos que me acompañan en el espectáculo.
- Pero tu
"loca" sí está muy compuesta como personaje: muecas, andares...
- Improviso a menudo. Lo
que sucede es que posee muchos elementos míos. Yo soy una persona
cuidadosa y elegante en mis movimientos. Tengo muy pocas reqlas. Me guía
más la intuición; aunque, claro, eso hay que probarlo sobre la escena.
- ¿Hasta
cuándo puedes seguir con tu personaje?
- No me fijo
metas. Descubriré otra cosa como esto y, si me gusta, podré dejar de
hacer este personaje.
- ¿No te han
ofrecido trabajo como actor?
- Sí, pero para proyectos
descabellados, como por ejemplo un Tenorio o bien para obras comerciales
por la proyección del personaje de Pavlovsky. No acepté. Lo que sí pensé en una ocasión es hacer
La
Dama de las
Camelias a través de mi "loca". Hablé con Terenci Moix, pero él me
desengañó. Aquello daba para un "sketch". El chiste se
agotaba, y hacerla en serio…
- ¿Eres un
sentimental?
Sobre
todo en las entrevistas televisivas, hay gestos en Ángel que son los de la "loca": abultar el carrillo
mediante la lengua, deslizar la puntita de la lengua por sus labios de
piñón, ciertas poses… Cuando las pestañas de abultado terciopelo
caen y la cara vuelve a su tersura natural sí parece olvidarse a la
"loca" en el camerino. Quien lo conoce desde su
"Café-Concert" en Argentina (un antro de arte y cultura) y sus
intervenciones como actor presentador y creador de otros espectáculos hablan
del "estilo Pavlovsky". Admira el trabajo de Lindsay Kemp y el de Lluis
Pasqual en El Público, aunque lo
entienda a medias. Ángel Pavlovsky
es el travestí que rompe moldes y se lanza al público con un alocado
melodramatismo teñido de la ternura que proporciona la tragedia y
alegría de vivir del "cabaret"
ANGEL PAVLOVSKY
1941: |
Nace en Rivera (Argentina), hijo de emigrantes rusos. 1959: Simultanea estudios de medicina y arquitectura con
trabajos de "extra" en óperas. Años
después: actor, mimo, director de sus propios espectáculos, y presentador de TV. |
1969: |
Primer viaje a Europa: París. Bailarín "boy" de Etel Rojo en el Talía de Barcelona.
Vuelve a Argentina. |
1973: |
Segundo viaje a Europa: España. Espectáculo de mimo en el Alfil de Madrid. Barcelona de Noche: espectáculo de
mimo en "Gay-Clubs". Travestismo
con estilo propio. |
1982: |
Orquesta de señoritas, espectáculo-cabaret en teatro con la creación de la "Gran Estrella Pavlovsky"
(1). 1986: Este es mi lugar, segundo espectáculo
con la "Gran Pavlovsky" (2). |
Cfr.
crítica en RESEÑA, nº 136, enero 1982, p. 18. (2)
Cfr.
crítica en RESEÑA, nº 174, mayo 1987, p. 19. |
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