RESEÑA 1987
NUM. 174, pp. 15-16 |
Teatro Stary de Polonia
LA VIDA ES SUEÑO
Traducción – Imitación
Polonia nos ha visitado en varias ocasiones en los sucesivos
Festivales. Entre ellos el Stara Teatr y el Cricot 2. |
Título: La Vida es Sueño.
Autor: Pedro Calderón de la Barca.
Traducción y versión (imitación): Jaroslaw M. Rymkiewicz.
Versión estrenada: Stanislaw Radwan.
Producción: Teatro Stary de Cracovia (Polonia).
Escenografia: Jerzy Juk-Kowarski.
Música: Stanislaw Radwan.
Coreografia: Tomasz Golebiowski.
Intérpretes: Krzystof Globisz (Segismundo), Jerzy Binczycki
(Basilio, rey de Polonia), Jerzy Radziwilowicz (Astolfo), Jerzy
Trela (Clarín), Dorota Pomykala (Ros aura), Danuta Maksymowicz
(Estrella), Aleksander Cabisiak (Clotaldo).
Estreno en Madrid: Teatro de la Comedia,
12- III – 1987 (Festival de Teatro de Madrid, 1987) |
FOTO: STARY TEATR (CRACOVIA) |
Esta La Vida es Sueño que nos trae el Teatro Stary de Polonia
(1), posee diversos ingredientes dignos de tener en cuenta.
Aborda el tema de la "dramaturgia" (noticia de actualidad en
nuestro país en este año con motivo del primer estreno del
Teatro Español, Los despojos del invicto Señor) y la importancia
del actor como elemento primordial en el teatro, frente al
espectáculo escenográfico que obnubila a l espectador y apabulla
al intérprete.
La "dramaturgia" de esta versión se debe a J.M. Rymkiewicz,
poeta y autor dramático polaco que ha traducido la obra. Pero
existe una doble dramaturgia: la primera es la traducción de la
obra de Calderón que, según el propio traductor, hay que
llamarle "imitación". Este es su concepto acerca de las llamadas
traducciones.
El término "imitación" podríamos equipararlo a "versión libre".
Comienza por no tener en cuenta el verso y, por el contrario,
busca una expresión sintáctica más acorde a los cánones del s.
XX a través de la prosa, aunque no olvida el margen de poesía
que rezuma el verso original con sus ritmos sonoros y cadencias.
La "imitación" está en crear un nuevo vehículo morfológico que
contemple el original y no se reduzca a un mero lenguaje para ir
a la compra.
El texto de Calderón le sirve como base e hilo conductor, pero
no tiene empacho en añadir escenas y motivos tomados de las
fuentes más dispares: de otras obras del mismo autor, romances,
simbología freudiana, autores actuales. De este modo, proyecta
una visión muy personal del teatro del barroco como sucede con
este Calderón. Lo que pretende es llegar al espectador polaco y
más ambiciosamente, al hombre de hoy.
La segunda dramaturgia es la que se ofrece en esta versión
concreta. De aquella "imitación", Stanislaw Radwan (director
artístico) fragmenta el texto escogiendo lo que piensa más
importante para sus fines. Prefiere la parte más filosófica y
rehuye lo que huele a enredo de capa y espada o todo lo que
tiene de mayor espectacularidad. De este modo la obra
calderoniana, le sirve de alegato a los espectadores de 1983
(creación de la obra) que vivían (y viven) una situación
política determinada en su país.
Puestas las cosas así, asistimos a un Calderón "sui generis" y a
una obra del barroco que se hace más económica en cuanto a su
despliegue dramático.
El autor clásico (el del Siglo de Oro y secuelas) se acerca a la
vida teatralmente y mezclando géneros: comedia y drama,
intrascendencia y fIlosofía. Era el modo de enseñar
entreteniendo o de alegar y criticar con dosis de sal y
pimienta. De ahí sus sesudos personajes y sus caricatos, sus
densos textos y sus escenas de acción en lances, guerras o
vistosos desfiles. Mezclaba el espectáculo y la situación
intimista.
Todo esto desaparece en la segunda dramaturgia (no en la
dramaturgia de Rymkiewicz), con lo cual el texto se convierte en
un hueso duro de roer para el desconocedor del idioma. Y desde
luego se olvida a Calderón, lo cual no es ningún crimen, una vez
que esto se vislumbra. Lo más que se puede decir de esta
adaptación es que no le mete el diente en la traslación de un
clásico al mundo moderno. Tampoco creo que le importase mucho al
Teatro Stary, una vez que su preocupación es hablar al pueblo
polaco de unos modos de entender la vida que se pueden encontrar
en Calderón y hablarles en clave, como hablábamos en clave en
nuestra época pasada.
UN DUDOSO ESPACIO ESCÉNICO
Concebida la obra como arenga política, importaba entrar de
lleno en los espectadores y de ahí la inundación del espacio
escénico en todo el teatro. El escenario a la italiana se
respeta pero unido umbilicalmente a través de un pasillo
elevado, con el fondo del patio de butacas en el que, elevado
también, se crea otro pasillo para situar un gran cañón y el
desenvolvimiento tímido de algunas de las escenas.
En la rueda de prensa se habló de la inadecuación del teatro de
la Comedia para un espectáculo como éste. Por lo visto los
decorados corrían a lo largo de las paredes del local (aquí
tales pare des no existen porque están ocupadas por los palcos,
aunque se hubieran podido tapar con los tales decorados (?)... )
y se pretendía que el espectador quedase envuelto. La realidad
de la versión española es que casi todo sucede en el tradicional
escenario a la italiana y no se ve mucho fundamento en el resto
de pasillos que inundan el patio de butacas. Las acciones allí
son transitorias, y para el espectador molestas, ya que terminan
produciendo una leve tortícolis. Es posible que no se haya
encontrado la auténtica adaptación.
Destaca la interpretación en todos y la discreta escenografía
cuya creación de sucesivas puertas, abiertas freudianamente como
en Recuerda de Hichtcock, producen un agradable efecto. Para el
espectador español el final es un enigma: Segismundo danza en
una continua demencia y con una inacabable sonrisa.
La Vida es Sueño de Calderón -Rymkiewicz- Radwan, en la versión
del Teatro de la Comedia, no deja traslucir todo el mérito que
prometía. Sí, en cambio, es escuela de interpretación.
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- Fundado en 1791
por Mateusz Witkowski ha creado escuela y es una
institución en Polonia. A partir de 1950 se ha
dedicado al repertorio romántico y shakespeariano
con cuidadas y refinadas puestas en escena y un alto
nivel en formación de los actores. Entre sus
directores se cuentan Kantor, Wajda,
Grotowski,
Jarock y Swinarski.
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