EL LEÓN DE INVIERNO

LO HUMANO ENFRENTADO AL SUEÑO IRRENUNCIABLE
DE QUERE EMULAR A LOS DIOSES.
O AL MENOS INTENTARLO

Leonor de Aquitania que la iconografía legendaria presenta cabalgando a caballo y con el pecho desnudo para levantar el ánimo de sus tropas, llega al Centro Cultural de la Villa de Madrid.

En esta temporada Leonores ha habido varias: coral y en monólogo. Esta versión es más coral y tuvo su película en 1968 con Katherine Herpbun y Peter O’Toole. Su estética un tanto bárbara marcó época en eso de la reconstrucción de los mundos históricos. Posteriormente en el 2003 Glenn Close y Patrick Stewart volvieron a interpretar otra película.  Teatralmente en el 1990 subió al Teatro Infanta Isabel de la mano de Joaquín Vida como director y Agustín González y María Asquerino como protagonistas.

A Leonor se le han adjudicado dos leyendas:

SALADINO

La primera fue la de relacionar a Leonor con el sultán de Egipto Saladino. Se cuenta que se enamoraron y decidieron escaparse, Luis enterado de los planes mandó a sus hombres a recuperar a su esposa a la cual atraparon cuando se disponía a embarcar en uno de los barcos del sultán. Realmente nada de esto ocurrió, y de haber pasado no sería Saladino el galán de la historia pues, en los tiempos de los que hablamos Saladino contaría como mucho doce años y Leonor veinticinco.

Entre los historiadores a Saladino se le relaciona más bien con Ricardo Corazón de León, hijo de Leonor, como su amor platónico.
LUIS VII, EL JOVEN LEONOR, SU MUJER

La segunda y más atractiva fue la de la cruzada que llevó a cabo Leonor acompañada de su ejército de 1.000 mujeres, con las que luchó contra los turcos apoyando a su tío Raimundo, cabalgando a pecho descubierto. Su marido se la llevaría a la fuerza. No se puede explicar con seguridad la procedencia de esta leyenda, lo que si parece posible es que tomando de ejemplo al rey numerosos caballeros llevaran consigo a sus esposas y esta a su vez a sus damas con lo cual parecería que un gran número de mujeres pasaran como cruzadas.

LEONOR DE AQUITANIA
PRECURSORA DEL FEMINISMO

Alicia Sánchez que en esta versión es Leonor nos vierte un jarro de agua fría: He investigado por varias partes y desde el punto de vista histórico no hay nada que confirme que Leonor fue a pecho descubierto y a caballo al frente de sus tropas.

LEONOR DE AQUITANIA

No dejaba de ser atractiva la segunda leyenda como imagen liberadora. Un top-less sin el contexto de la playa. Pero la historia es la historia. Leonor murió en 1204 en la Abadía de Fontevrault, habiendo sobrevivido a todos sus hijos salvo Juan, Juana y Leonor. Fue enterrada al lado de su esposo y suquerido hijo homosexual Ricardo, y su tumba es visitada por miles de mujeres, que van a rendirle homenaje a la seductora precursora del feminismo.

CUANDO LAS MÁSCARAS CAEN

El león de invierno (Broadway, 1967) de James Goldman (Chicago, Illinois, 30 –VI- 1927 / Nueva Cork, 28 – X – 1998) se ha convertido en un clásico contemporáneo y sigue representándose en el mundo entero. Juan Carlos Pérez de la Fuente (Salamanca del Jarama, Madrid), tras dejar de ser Director del Centro Dramático Nacional de Madrid, fundo su propia productora y dirige varios espectáculos:

o    2005: Oscar o la felicidad de existir (Eric-Emmanuel Schimitt)
o    2006: El mágico prodigioso (Calderón de la Barca)

Elegir este texto por parte de Juan Carlos tiene su historia:

• Hace 3 años dejaba el Centro Dramático Nacional – aclara Juan Carlos – y me convertía en empresario. Cuando estuve como director del Centro tenía muy claro el que había que hacer autores españoles. Con todo hice Arthur Miller y pensaba entonces hacer este texto de Goldman, pero lo fui dejando. Es uno de los textos del s. XX que narra lo clásico y lo contemporáneo. El éxito general de la obra en todos los países se explica porque nos reconocemos en ella. Se habla de la desmesura del poder. Es un quitarse las máscaras en esa noche de Nochebuena cuando no tienen que fingir y entonces aparecen todos ávidos de poder. Se creían inmortales y descubren que son seres humanos en pedestales de barro.

Esta agresividad que surge sobre la escena por la lucha de poder se tiñe, según Juan Carlos de humor:

• Hay humor con muecas congeladas pero sobre todo hay un amor desmesurado. Sólo quien ama mucho puede ejercer el amor y el poder.

LEONOR DE AQUITANIA

Al tropezarse uno con Leonor de Aquitania y con los que le rodean es imposible no tropezar con la leyenda. A Juan sin Tierra y Ricardo Corazón de León los conocimos a través del cinematográfico Erron Flyn cuando se convirtió en Robin Hood. Y, desde siempre, estaban las leyendas sobre Leonor mencionadas anteriormente. El que todo esto tenga un aire de leyenda le proporciona el distanciamiento que es fundamental – recuerda Juan Carlos.

Este toque legendario es lo que dio libertad a James Goldman para idear su historia:

• Leía, estudiaba y luego imaginé cómo hablaban, cómo pensaban, qué querían de sus vidas. Es evidente que es imposible saber exactamente cómo fueron en realidad: la verdad  de las cosas siempre está debajo de la apariencia. Por eso hay que imaginarla.

TODOS LOS PERSONAJES
SOBRE UN TABLERO DE AJEDREZ

Enrique II, rey de Inglaterra y marido de Leonor su secuestrador es Manuel Tejada, que posee un amplio currículo como actor de teatro, cine y televisión. A nivel de público televisivo se le recuerda por Cañas y barro y Verano Azul. El público de teatro ha podido verlo en múltiples ocasiones.

MANUEL TEJADA FOTO: CHICHO

Para un actor si el director es feliz con su montaje, como lo está Juan Carlos, eso es lo importante. Yo estoy especialmente feliz por interpretar a este personaje. Es endiablado. Es lo máximo que se me ha podido ofrecer. Es como una partida de ajedrez. Ha puesto un suelo que viene a ser el tablero y sobre él se mueven el rey, la reina y el peón. La única que no se mueve es Alix (Celia Freijeiro), mi amante. De la cual tengo que decir que es una maravillosa actriz.

Alix es la hermana de Felipe Capeto (Alberto Amarilla), rey de Francia y, a la vez, amante de Enrique II Plantagenets y prometida de Juan (Miguel Ángel Valcárcel), el hijo menor y el candidato paterno para la sucesión real.

El amor, la pasión, los celos, las conspiraciones son constantes – revela Manuel Tejada – en el que hay mucho amor que permanece hasta el final en la pareja. Por nuestra parte nos hemos entregado totalmente. Hemos ensayado en un Colegio Mayor y nos han dado las tantas ensayando.
ENRIQUE DE PLATAGENET

OTRAS LEONORES  DE FICCIÓN
LA COMPETENCIA

La mítica y legendaria Leonor de Aquitania es Alicia Sánchez. Quienes tenemos cierta edad la tenemos asociada a los primeros momentos de la salida del túnel político. Tal vez sea por su interpretación en Furtivos, la película de José Luis Borau. Después fue mucho cine, teatro y televisión. También premios.

• Si Manuel está contento con su Enrique II, yo con Leonor estoy encantada, aunque últimamente se han hecho varias.

En la temporada madrileña del 2006 han sido:

	Leonor de Aquitania de Alfonso Méndez, que interpretaron: Marta Puig, Alfredo Cernuda, Daniel Muriel y Mar Bordillo, bajo la dirección de Mercedes Lezcano.
	Yo, Leonor, un monólogo interpretado por María Luisa Merlo, con motivo de su 50 aniversario.

De las últimas Leonores de ficción está en el 2003 la de Glenn Close, cuyo rey Enrique lo interpreta Patrick Stewart, bajo la dirección de Andrei Konchalosky

NOCHEBUENA
¿PAZ A LOS HOMBRES DE BUENA VOLUNTAD?

Son las Navidades de 1183, Enrique II de Plantagenets, rey de Inglaterra, reune en el castillo de Chinon (Francia) a su familia: Leonor de Aquitania, la reina su esposa a la que mantiene prisionera desde hace años y a sus tres hijos vivos: Ricardo Corazón de León, el hijo mayor, Godofredo, el hijo mediano, y Juan sin tierra, el hijo menor. La sucesión de Enrique es de inmediato y la elección dependerá del equilibrio de fuerzas entre Inglaterra y Francia. Con motivo de las navidades también están en el castillo Felipe Capeto, rey de Francia y su hermana la princesa Alix, amante de Enrique y prometida de Juan, el candidato paterno a la sucesión real.

LEONOR DE AQUITANIA

TRES HIJOS
AMBICIONANDO EL TRONO

Enrique Arce es Ricardo.

• Cuando me llamó mi representante y me ofreció el papel de Ricardo, me vino a la mente no la película sino el que en las escuelas de EEU es un texto sobre el que se trabaja y se representan muchas escenas. Dije que sí. Lo que no me esperaba es el Ricardo que Juan Carlos ha trazado. Ha hecho un estudio preciso y medido de los personajes. Lo que me faltaba me lo dio él.

Lo que le atrae a Enrique es la riqueza del personaje. 

Es un personaje que ama y se entrega y al mismo tiempo compagina bien el deseo de poder y el amor a su madre y a Felipe Capeto. Por un lado es al que odia como guerrero pero es al que cree, porque creer es amar. Nunca me ha llamado tanto un personaje. Al principio me dio mucho miedo y ahora puedo compartirlo y estar a la altura de lo que esperaba Juan Carlos de Ricardo.
RICARDO CORAZÓN DE LEÓN

Felipe Capeto, el joven Rey de Francia, lo interpreta el joven Alberto Amarilla, que se ha prodigado más en cine y televisión.

MANUEL TEJADA/ALBERTO AMARILLA FOTO: CHICHO

Es la primera vez que hago teatro y es importante para mí. Es diverso al cine. El cine te requiere  mucha verdad, pero en el teatro te obliga a que la emoción sea pública. Es una obra que me apasiona. Habla de la agonía del poder. Bueno ¿es amor o poder? Mi personaje ha nacido de la debilidad, que es una forma de poder, y así convertir a Francia en la potencia mundial. Felipe parte de la debilidad y va a ser fuerte. Decide aliarse con el poder y para eso utiliza el amor y la sensualidad para alcanzarlo.

Néstor Arnas, procedente de la Comunidad de Aragón, interpreta a Godofredo.

• Cada actor tiene con su propio método y su propia experiencia y después está el tipo de texto y también la influencia del director. Hay directores que trabajan mucho con los actores y este es el caso de Juan Carlos. Nos vuelve locos, pero nos gusta. Los personajes de este texto tiene dolor y cada uno lo trabaja con ironía y con sarcasmo. Mi Godofredo es el único que no miente y busca por todos los medios que le quieran. Sus herramientas son la ironía, el sarcasmo pero no es el malo de la película. De todos modos quien tiene que juzgarlo es el público y no yo.

Para Miguel Ángel Valcárcel, que es Juan:

Yo creo que tienes que vaciarte y confiar en el director. En la función número 10 te das cuenta de lo que estás haciendo realmente. Aquí es un Juan sin Tierra adolescente lleno de granos y sin criterios propios. Más tarde conspirará contra Ricardo, su hermano, ya en el trono. La vida del legendario Robin Hood, transcurre cuando Juan sin Tierra ha usurpado el poder y Ricardo lucha en las cruzadas.
JUAN SIN TIERRA

En medio de toda esta intriga de poder y amor Alexis, que interpreta Celia Freijeiro, es el contrapunto.

	Ella está en medio de esta familia de locas estrategias. Mi personaje es limpio. Es ingenua, inocente de lo que pasa realmente y no comprende nada porque está absolutamente perdida. El resto hay que verlo sobre el escenario.
	Celia Freijeiro FOTO: CHICHO

LA PELÍCULA DE 1968
ODIOSAS COMPARACIONES

Alicia Sánchez aludía a otras Leonores como reto. Un reto mayor está en la película de 1968 que marcó época y termina por ser un desafío.

Y lo es – corrobora  Juan Carlos. Son las ironías del destino. Siendo el original teatro y teatro en estilo puro, en el cine fue un gran éxito. La honradez que nos caracteriza es que la Leonor, Enrique, Ricardo y demás personajes son nuestra visión. Nos hemos adentrado obsesivamente por los resquicios emocionales de los personajes y lo que más me interesaba era mostrar que el ser humano es capaz de cualquier cosa por alcanzar el poder. Ya les gustaría a Zapatero y a Rajoy llegar a la altura de  estos personajes En ningún momento hemos intentado imitar la película. Aquel fue su trabajo y éste es el nuestro.

EL LEÓN DE INVIERNO (PELÍCULA, 1968)

La obra de Goldman tiene una ventaja y es que aunque sea personajes históricos, también lo son de ficción.

Esto hace que sea materia teatral. Lo mejor es ver cómo desaparecen los actores para prestar sus cuerpos a los personajes. Y esto es importante. Los directores de ahora insisten mucho en la luz y demás elementos externos, pero te das cuenta que toda puesta en escena si no pasa por el actor el resultado es fallido. Nunca había visto, como en este caso, la dedicación de los actores. Cómo han llorado y cómo han penetrado en los personajes. Hay dos generaciones distintas de actores y ha habido una gran generosidad por entendernos todos. En el caso de Alberto, que era la primera vez que pisaba el teatro se ha ido decostrando todos sus talentos. De eso va el teatro. Tiene que estar prohibido eso de actores buenos y malos, de staniwlasky y demás… Lo que hay que plantearse es que todos vamos hacia una meta común: la verdad.

MANUEL TEJADA ALICIA SÁNCHEZ FOTO: CHICHO

Volviendo a la película, una puesta en escena que impresionó fue una estética un tanto bárbara – las gallinas por medio de la sala del trono – y un movimiento, un tanto salvaje, de los actores.

MANUELTEJADA/ALBERTO AMARILLA ALICIA SÁNCHEZ/CELIA FREIJEIRO FOTO: CHICHO

No. No está la barbarie, ni ese tipo de movimiento – confiesa Juan Carlos. Hay un movimiento que va a llamar la atención. Es un movimiento muy medido. Se le asigna al personaje ser una ficha de ajedrez y se crea un movimiento aritmético. No he incidido en la parte bárbara sino en el interior. Lo otro eran usos y costumbres. No me ha interesado tanto la animalidad como las maquinaciones para llegar al poder y que no les importa nada con tal de conseguirlo. Son monstruos, complicados mentalmente y lo de menos es que sean unos cerdos en el momento de comer. El poder es eso y no Teresa de Calcuta. Está en juego el mundo. Actúan así porque hay territorios en juego.

¿PENSABA GOLDMAN
EN LOS PODERES POLÍTICOS DE SU ÉPOCA?

A partir de estos personajes históricos-legendarios James Goldman podría muy bien haber escrito una parábola sobre el poder americano del final de la década de los años 60 del s. XX. 

MANUEL TEJADA/CELIA FREIJEIRO FOTO: CHICHO

A Goldman le gusta las transposiciones históricas, pero no tanto hacia una época concreta. El texto no tiene nada que refleja algo de los años 60 en cuanto poder o situaciones. Se trata del poder en general. Los anacronismos son los que le acercan un poco, pero la realidad es que no tienes que hacer ahora grandes retoques. Se centra más bien en la familia como controladora de todo como reyes que son, pero ni siquiera la familia queda bien parada. La familia es utilizada. El mundo no ha cambiado mucho. Ahora estamos expectantes ante el que la princesa Leticia de a luz y a lo mejor coincide en nuestro día del estreno. Todos estamos expectantes, debido a la sucesión. No ha cambiando tanto el mundo y esto sirve tanto para la república como para la monarquía. Habla del poder en cualquier siglo. Seguiremos reuniéndonos padres e hijos y nos diremos las barbaridades de siempre.

UN LEON Y UN TABLERO DE AJEDREZ
COMO ESPACIO ESCÉNICO

Goldman recurre a unos personajes históricos y nos situados en el 1183, pero ello no condiciona a na fidelidad ambiental histórica. Al ser una leyenda  o me he visto obligado a utilizar un castillo sino algo más simbólico: un escudo. Lo he tomado de una Iglesia del s. XII del Norte de un pueblo Burgos. Representa un leoncito y que convierto en leiv-motiv de la obra como algo irónico. Lo que sí he recreado es un cierto ambiente.

La escenografía ha recurrido a un discreto tablero de ajedrez, puesto que la obra es un ir y venir de los personajes, tanto a nivel físico como conceptual. Ahora te como, ahora me comes.

• El tablero de ajedrez representa la parte metal, aritmética y geométrica. Los actores tienen movimientos precisos, ya que están cavilando, pensando. Es un juego en que no se dice todo.

El vestuario, a grandes rasgos, sugiere una época medieval sin que sea reproducción de las miniaturas que conocemos a través de los libros. Terciopelos alternan con telas de plástico en corpiños y mangas. Juan Carlos Pérez de la Fuente los califica como

• Un vestuario con toques de Strak Treack - aludiendo a las televisivas historias espaciales de los años 60.

HEMOS TRANSITADO POR LA VERSIÓN
CON LIBERTAD PERO SIN PERDER LA CABEZA

La versión literaria sigue fiel al original.

• Cuando un texto es bueno sólo hay que seguirlo – advierte Juan Carlos. Hemos cambiado algunos giros, para adaptarlos a los de nuestro país. La traducción la han cotejado los representantes de los derechos de autor de Goldman, puesto que él ya ha muerto, y les ha registrado. Hay también algunos anacronismos como el árbol de Navidad. En general hemos transitado con libertad pero sin perder la cabeza. Por eso el vestuario combina terciopelos, plásticos y gafas. Todo ha sido buscado. Lo hemos hecho desde las entrañas. Tenemos que ser generosos y saber que manipulamos y que la verdad no la tenemos nadie.

El estreno oficial es en el Centro Cultural de la Villa el 25 de abril. Ya se ha tenido una primera representación en Móstoles.

Hemos comprobado que la obra conecta. Uno de los temas que se airean es la homosexualidad que está tratada rotundamente. Una de las escenas que ya en su época – 1967 – llamó la atención es el descubrimiento de de un Ricardo Corazón de León como enamorado del rey de Francia Felipe. Es más también hay un texto en el que el Rey Enrique relata haber amado a todos, incluyendo jovencitos. Eso me extrañó y tuve que consultar con los representantes del autor, por si era un añadido posterior de  las versiones. Se me dijo que estaba en el original. Este tema, sea histórico o no, no deja de ser una rotura de tabúes en los años 60. Ahora hemos aceptado los matrimonios homosexuales. Con todo en Móstoles con la escena del beso entre Ricardo y Felipe, en el patio de butacas sucedió algo. Cuando se levante el telón ahora tal vez tendremos un escalofrío: Sucedió un 25 de abril.

MANUEL TEJADA FOTO BASE: CHICHO

¿QUÉ PASÓ DESPUÉS?  

ALICIA SÁNCHEZ FOTO BASE: CHICHO

Muerto Enrique II,  Ricardo es coronado rey de Inglaterra. Leonor siguió activa en el gobierno. Juan sin Tierra, trató de apoderarse de la corona de su hermano Ricardo. Leonor frena logra frenar la intriga y pone paz entre los hermanos. A la edad de 82 años aceptó la muerte con valor. Fue placentera.  De pelo muy canoso nunca padeció enfermedad alguna y no perdió  nunca su belleza.          Murió en 1204: En el sepulcro se la ha inmortalizado con un libro entre las manos como señas de identidad: saber, amor y arte.