LA RETIRADA DE MOSCÚ
El
Centro Cultural de la Villa de Madrid inicia temporada teatral
con un texto de William Nicholson: La Retirada de
Moscú. Autor desconocido en los escenarios españoles, viene
de la mano de la versión Nacho Artime. Parece como si
hubieran existido algunas críticas de por qué un autor
extranjero y no echar mano de autores españoles.
NACHO ARTIME |
- Tenemos problemas
con textos españoles. No encontramos el teatro que
me gusta. Parece que los autores españoles están muy
preocupados por la televisión y escriben para ella y
con éxito. Pero no es que no queramos montar autores
españoles. Yo, al menos no sé dónde encontrarlos.
Por eso no se trata de colonización del teatro
extranjero.
|
El plural que emplea Nacho no es mayestático. Se refiere
a que esta producción pertenece a él y a Concha Busto –
Concha Busto Producción y Distribución - , fundada en octubre de
1991 por dos profesionales del Teatro: Concha Busto y
José Luis Arza, han distribuido más de 40 espectáculos y ha
producido. Desde 1993 ha producido una serie de títulos de
éxito. Un director ligado a esta productora es Luis Olmos
– actual director del Teatro de la Zarzuela – y uno de los
actores habituales es Gerardo Malla. La obra se estrenó
ya el año pasado y ha estado de gira por buena parte de las
provincias españolas y con elogiosas críticas. Parada y fonda es
Madrid.
- Es una obra rabiosamente
actual
– corrobora Luis Olmos,
director del montaje – y muy intrínseca al
comportamiento humano. Al mismo tiempo es un texto
chispeante. Habla de la separación matrimonial, tras muchos
años de vida en común, y cómo se afronta. Lo genial es que
de un tema arduo y espinoso se hace una radiografía llena
del sentido del humor. Y algo importante: en los actores
está todo el peso de la función.
El título, La retirada de Moscú, lo toma de la famosa
retirada de las tropas de Napoleón de Moscú. No tiene que
ver nada con la guerra. El “retirada” se refiere a la vida del
matrimonio y el hijo.
Tres personajes – el matrimonio y el hijo – se
enfrentan, desde su personal posición, a la
situación nueva que se crea. Surgen temas de
índole universal: análisis de la pareja, los
vínculos emocionales, la fragilidad, la
fortaleza y los mecanismos que guían al ser
humano cuando atraviesan momentos difíciles. |
EL ACTOR Y LA PALABRA
En esta temporada de 2005-2006 es la segunda vez que en el mundo
de la farándula se reivindica al actor y la palabra. Una de
ellas fue con motivo de la presentación de Fuenteovejuna
por el Teatre Nacional de Cataluña, con motivo de su
presentación en Madrid, en el Teatro Clásico. Ahora lo es con
esta Retirada:
- Lo más importante está
en los actores
– afirma Nacho -,
es a pelo. Es decir que el actor sepa enganchar y
estar a la altura emocional a donde nos quiere llevar.
Es en los actores donde recae todo el peso de la
función. Nos emocionan y nos divertimos con ellos.
Y en una línea más reivindicativa se expresa Gerardo Malla.
Esboza una sonrisa bonachona, dibujada con una fina ironía y
rememora unas palabras de Iñaki Gabilondo:
- El otro oí
a Iñaki
Gabilondo decir, y me sentí
solidario con la frase, que él yun amigo
había formado un club contra la música de
fondo. Yo también soy enemigo de músicas de
fondo en la vida – léase televisión,
debates… - y en el teatro también a todas
horas y en todo momento también la hay. El
teatro cada vez se parece más a las plazas
de toros de tercera, en donde lo importante
es la música y no el toro o el torero. Y si
el alcalde no da la orden de “¡Música!”,
se enfadan. El teatro en Madrid se llena
cada vez más de música. No tengo
inconveniente de que sea así pero a cambio
de que no nos quiten la palabra. Res
importante que el teatro reivindique la
palabra. El día que nos comuniquemos por
sonidos, será otra cosa. Y esta obra emplea
la palabra y muy bien tanto por el talento
del autor, de traductor y del de nosotros
mismos.
|
|
El nosotros mismos lo
conforman Gerardo Malla (Edgard, el marido), Kiti
Mánver (Alice, la esposa) y Toni Cantó (Jaime, el
hijo). Y como apostilla añade algo así como un pensamiento
apocalíptico:
- Sólo decir que
quienes vengan, van a ver obra de palabras y
conflictos. El día que se pierda la palabra, todos
seremos más feos.
Llama la atención la queja de Gerardo, un, primero actor
en el Teatro Español de Madrid en 1958 y después actor
comprometido con el mundo de la izquierda en aquellos años –
finales de los sesenta - en que abríamos las ventanas para
ventilar el país y respirar un aire puro.
Después arremetió con la dirección- La Murga (A. Jiménez
y Francisco Díaz), De San pascual a San Gil (Domingo
Miras), El día queme quieras (José I. Cabrunas),
Dobles parejas (David Wilse), Bajarse al Moro (Alonso
de Santos), La Taberna fantástica (Alfonso Sastre),
Fuera de Quicio (Alonso de Santos), Las Galas del difunto
(Valle Inclán) - y ella le llevó a liarse con la lírica en el
Teatro de la Zarzuela dirigiendo una espléndida versión de La
Chulapona de Moreno Torroba. Era una época en que
siendo director del Teatro de la Zarzuela José Antonio Campos,
se intentaba repensar el tratamiento del género en nuevos
cánones. En aquella ocasión Gerardo Malla se expresaba
así:
- Hay como unas
ganas de retomar de esta casa
-Teatro de la
Zarzuela - y muy concretamente por
parte de José Antonio Campos, … hay como un
deseo de reconquistar partes perdidas de la
zarzuela que hacen que de pronto se junten una
serie de colaboradores y hagan un espectáculo
cuyo éxito está ahí. Yo creo que se debe al
esfuerzo y a la visión clara de que la zarzuela
tiene todavía cosas que decir y las está
diciendo, desde luego echándole la fe, el
entusiasmo y también los medios económicos que
esto requiere. Pero que está ahí y que tiene
mucho que decir, sin duda.
(Gerardo Malla,
entrevista en TVE con motivo de la retransmisión
de La Chulapona, MCMLXXXVIII (1988)
Y también resulta impactante su declaración al tener, en esta
obra, como director a Luis Olmos – actual director del
Teatro de la Zarzuela – y versado en direcciones líricas, hasta
el punto de dar un toque musical a su delicioso montaje de La
celosa de sí misma. Y sigue la sorpresa porque, en esta
obra, Nacho Artime es el traductor y productor, pero es
un hombre que se ha liado con muchos musicales.
- Yo sólo
quiero decir que disiento de
Gerardo
Malla con respecto a los
musicales. Yo he adaptado muchos musicales
El nombre de Nacho ha ido muy unido a una época en que
comenzaba a entrar el gran musical foráneo en España:
Jesucristo Superstar
Evita
A Chorus Line
El Hombre de la Mancha
Grease
Jekyl & Hyde
Hermanos de sangre
Meter Pan
My Fair Lady
Pop Corn. |
Cuando a Gerardo se le recuerda su Chulapona,
humorísticamente responde a modo de disculpa y en todo de
parodia, por su anterior panegírico sobre el teatro de la
palabra:
- “Es
que la zarzuela es muy nuestra”
UN INGMAR BERGMAN LIADO CON UN WOODY
ALLEN
Luis Olmos ha definido la obra de William Nicholson
como un:
LUIS OLMOS |
-
Híbrido entre
Ingmar Bergman,
en lo que tiene de análisis
emocional, y
Woody Allen,
en lo que tiene de chispa.
Cuando lo leí por vez
primera tuve la sensación de
asistir a una atractiva
síntesis. Por un lado sentía
palpitar el bisturí con que
Bergman desnuda
emocionalmente a sus
personajes y por esotro me
remitía a la dinámica
agudeza, cómica y corrosiva,
con que W. Allen traza sus
escenas. Eso supone un valor
añadido, pero muy delicado.
Muchas de sus situaciones
dramáticas, a su pesar,
resultan cómicas,
consiguiendo una cierta
hilaridad o patetismo que a
la vez de hacernos sonreír
nos sorprendemos que lo
hagamos.
|
La Retirada de Moscú está basada en un hecho real que
W. Nicholson vivió en sus propias carnes: la separación
matrimonial de sus padres y el verse involucrado como hijo. Ello
le llevó a utilizar el bisturí literario y diseccionar la
situación. El título viene obligado porque ante el conflicto, se
opta por la misma decisión que tomaron las tropas de Napoleón
al no poder con Moscú: la retirada para poder sobrevivir en una
situación límite.
El estreno mundial en Broadway – hace muy poco - fue una
sorpresa. Óptimas críticas y público diseminaron la obra por
todo el mundo. Es de esos títulos que abren temporada y
triunfan. El secreto se puede deber al enfoque que Nicholson
hace del candente problema del divorcio en la familia católica.
Para Luis Olmos, W. Nicholson
-
Escribe un texto inteligente,
universal y de eterna actualidad en
culturas occidentales como la
nuestra. Crea unos personajes
sólidos a los que disecciona, con un
lenguaje chispeante y lleno de
emoción, para mostrarnos, como en un
espejo, los delicados mimbres
emocionales con los que nos
manejamos cuando atravesamos
situaciones que inevitablemente nos
superan. Invitándonos a reflexionar
con grandes dosis de humor sobre
nuestra propia fragilidad y
fortaleza en esos momentos cruciales
de la vida.
El estilo por el que deambula el texto, puede ser definido como
el de un realismo poético, según Luis Olmos.
-
Posee una forma estupenda. Es un
texto lleno de poesía de arriba
abajo. Está dentro de esa línea
en el que el teatro no es la
vida misma, sino como la vida
misma.
KITI MANVER,
EMPLEA TODAS SUS ARMAS
PSICOLOGICAS Y COSMÉTICAS
Kiti Manver posee un amplio currículum cinematográfico,
televisivo y teatral. Es, pues, actriz “multimedia”. Aunque en
alguna ocasión ha dicho “es que hecho muchas cosas más”,
una cierta generación la recuerda como la muda – su nombre
sonaba a extranjero y su aspecto foráneo – de la película
Habla Mudita de Manuel Gutiérrez Aragón. Sorprendió
su interpretación y un tipo estiloso más allá de los Pirineos.
Después supimos que era indígena (de España y andaluza). Su
rostro se paseó mucho por las películas de Almodóvar
desde su Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón.
Sin llegar a calificarla como “chica Almodóvar”, sí que él ha
contado con ella en muchos títulos.
En esta ocasión es
Alice y,
desencadenado el
conflicto de la
separación, emplea sus
armas de mujer – el
maquillaje y la
peluquería – para
recuperar a su marido.
La cosmética no es la
imagen real del
personaje:
-
Estoy tan mona
porque Alice
se disfraza de mujer
joven para recuperar
a su marido. Es un
personaje muy
fuerte, muy
romántico y
generoso. Cuando su
marido le dice que
se va, aquello es
como un hachazo. El
personaje me permite
dar todos los picos
emocionales que he
sacado adelante
gracias de
Luis
(Olmos). Ha
conseguido sacar de
mí desde lo más
turbio a lo más
sublime. Estoy muy
contenta de trabajar
con ella.
|
KITI MANVER |
TONI CANTÓ, UNA MONEDA DE CAMBIO
Toni Cantó es Jaime, el hijo sufridor.
TONI CANTÓ |
-
Me usan
– el padre y la
madre –
como moneda de
cambio. Me
transformo en el
recadero de los dos.
Lo cual es muy
frecuente que eso se
haga con los hijos
en estos casos. Esta
situación hace salir
de cada uno lo peor.
Y esto es tremendo
cuando lo vives en
carne propia. A
pesar de la tragedia
que ello supone, el
tono de comedia hace
del texto algo
insólito. Y, desde
que estrenamos, nos
ha sorprendido la
reacción del público
que siente el texto
como algo muy
cercano y capta bien
el tono humorístico.
No acaba de reir.
|
Toni Cantó fue conocido por el gran público como
presentador de TVE (1986) en La Tarde de Jesús Hermida.
A partir de entonces arrancó su carrera como actor en series
televisivas – Canguros, Siete Vidas -, en cine y teatro y
acumuló algunos premios. En teatro se ha paseado desde el
musical – Carmen, Carmen de Antonio Gala – hasta
los clásicos - Shakespeare, Valle Inclán - bajo la
dirección de José Carlos Plaza: Hamlet, El Mercader de
Venecia, Las Comedias Bárbaras …
TRES GENERACIONES DE ACTORES
Gerardo,
Kiti y Toni representan a tres
generaciones de actores en el teatro español. El más antiguo es
Gerardo Malla, que vivió todas aquellas lides de un
teatro español que comenzaba a cambiar de métodos
interpretativos y de textos. Kiti se sube a ese tren en marcha y
Toni aparece en el mundo de la farándula cuando el tren ha
cogido velocidad y el mundo de la interpretación es variopinto.
- En otros casos
– reconoce
Toni Cantó - sí que he visto que
existían diferencias entre las generaciones en el modo de
interpretar o abordar el texto. Aquí no nos ha sucedido esto.
Por otro lado lo que hay que tener en todos estos casos, cuando
el conflicto se presenta es sentido común. Yo me he encontrado
muy a gusto con mis compañeros.
Gerardo y Kiti refrendan lo dicho. Gerardo termina con un cómico
laconismo:
- Y yo también
- (el estar a
gusto).
El texto de la obra en castellano aparecerá próximamente en La
Brisa Ediciones.
|
BOCETO ESCENOGRÁFICO:
ANIEL BLANCO |
|