LA GEOMETRÍA DEL TRIGO BAJO LA MIRADA DE LOS ACTORES
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ZAIRA MONTES FOTO: SUSANA MARTÍN |
La Geometría del trigo ha supuesto una especial colaboración con los actores, todos ellos con un amplio curriculum teatral. Ello ha supuesto que lo ensayos se han transformado en un auténtico laboratorio en el que se ha diseccionado el texto con minuciosidad, y quitar textos.
En lo de quitar textos - precisa Alberto Conejero -, hay, en algunas funciones, un respeto literario que en el fondo que no le conviene a mi palabra teatral que lo que quiere es ser teatro. He descubierto en esta función el humor y que la gente pueda sonreírse y reírse en mis funciones. ES una función que tiene más tonos en mi escritura. Tiene humor, drama, momentos más intensos. De las que he escrito es la función que más se parece a una mirada poética sobre la vida con todos sus colores. Esa mezcla de humor con melancolía al drama, he descubierto que estaba en el texto y lo he descubierto dirigiendo. Confío que en el futuro esto puede establecerse como una brújula. En muchos autores mejores que yo, como Koltés o Chéjov, creo que en su escritura respira el humor, la ironía, la melancolía y, a veces, hay que dejar atrás el texto para poder encontrar lo que tiembla detrás del texto. En el primer pase con el público cuando escuchaba las risas a una de las escenas más emocionantes, me decía "¡Esto es!" Eso ha sido posible por el trabajo de ellos seis que no han tenido una cartografía cerrada, sino vamos a encontrar la obra ensayándola. La obra nos ha llevado a lo que era y ninguno lo sabíamos cuando empezamos. Los ensayos no pueden ser la reproducción de algo que ya se conoce, sino el descubrimiento de algo que se desea y aún no se sabe. Eso para mí ha sido este ensayo.
Los compañeros y compañeras que cohabitan con Alberto Conejero en este proyecto artístico coral son algunos de los mejores profesionales del sector: Consuelo Trujillo, Zaira Montes, Eva Rufo, Juan Vinuesa, José Bustos, Eva Rufo y José Troncoso que encarnan a los personajes de una familia : Emilia, Beatriz, Antonio, Joan, Laia y Samuel, un visitante inesperado.
CONSUELO TRUJILLO, Emilia (la madre de Beatriz) TODOS HEMOS APORTADO ALGO DE NUESTRA VIVENCIA
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CONSUELO TRUJILLO FOTO: www.madridteatro.net |
Consuelo Trujillo, creadora, directora de teatro y maestra de actores interpreta a la madre, y califica de "bonito" el proceso de trabajo
Comenzamos por una lectura y ahí se inició el viaje. Nos encontramos como equipo y fue un empezar sobre la obra y este proceso, sin saber hacia dónde vamos. Sabíamos que queríamos estar ahí, pero, luego, todo vino después. Alberto nos invitó a ir a su casa de Vilches (Jaén) donde transcurre, e alguna manera, la obra. Conocimos las minas, los olivares y todas esa zona que nos impregnó de la atmósfera de lo que contiene La geometría del trigo. Para mí, fundamentalmente, ha sido un proceso de lo que es un encuentro de creación y ver trabajar a un dramaturgo con los actores. Me ha gustado muchísimo ver cómo Alberto traía la obra, y a través del trabajo con nosotros y de lo que nosotros aportábamos, arrancaba hojas, cambiaba textos, cambiaba el orden de las escenas. Escribía por la noche y nos lo daba por la mañana par que lo probáramos. La obra ha estado viva en él, y nosotros vivos con su creación y aportando vida a la obra. El resultado ha sido un teatro en el que él es el poeta, pero, de alguna manera, todos hemos aportado algo de nuestra vivencia, de nuestra poesía propia, de nuestra historia personal como personas y como artistas también en La Geometría.
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JOSÉ BUSTOS / EVA RUFO / JUN VINUESA /JOSÉ TRONCOSO / CONSUELO TRUJILLO FOTO: SUSANA MARTÍN |
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Consuelo destaca el trabajo hecho y lo califica de bonito porque
hemos partido de la idea de los personajes.¿Cómo es una mujer que vive entre olivares en el año setenta y ocho? Como Alberto tiene mucha intuición aparece mi personaje. Es una Consuelo que yo no conocía y que Emilia me la rebela. Entonces aparece algo de mí que, en parte sí conocía y en parte no, y me sorprende. Ahí está la creación de modo que el personaje no es ajeno a mí, es una parte mía que el personaje me ha revelado. En esto no hay una impostura como, a veces, hacemos en el teatro. Aquí hay un parte del actor en ese personaje y ese es el lado humano.
Consuelo apunta la experiencia del primer pase con unas 60 personas, un previo, que define como
imperfecto pero liberante, porque ha habido un proceso largo de mucho recogimiento entre nosotros de búsqueda, pero que estamos deseosos de compartirlo. Creo que el teatro no se hace hasta que no viene el público. Cuando el público entra, entramos todos en otro proceso. Estamos emocionados porque vamos a descubrir otras corrientes de la obra. Ante el público ya lo viví. Me di cuenta de cosas que no me había dado cuenta, que lo trajo el público. Entonces me encanta esto. Después de muchos años de profesión estaba como una niña temblorosa en el banco y me temblaban las piernas, pero era feliz de sentir esa fragilidad que tiene el teatro y de que está vivo. Aunque hemos ensayado, no sabemos lo que va a suceder.
JUAN VINUESA, Antonio (el padre de Joan) BUSCAR LA HISTORIA QUE HAY DEBAJO DE LAS PALABRAS
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JUAN VINUESA FOTO: www.madridteatro.net |
Juan Vinuesa actor, periodista y profesor de interpretación, miembro de la compañía Club Caníbal y fundador de la compañía Albury Producciones (autor y director de Tus otros hijos no te olvidan). Se reafirma en lo dicho por Consuelo en lo referente a las continuas correcciones.
Alberto ha llegado a suprimir algunos de los párrafos más bellos, leídos. Cuando un autor es capaz de hacer eso es porque le importa la obra, el interés y la acción dramática y no su ego poético. Ojalá esos párrafos se puedan publicar algún día porque hay pasajes muy bellos y potentes, pero que eran reiteraciones o estaban fuera de la acción que conciernen a los personajes. Vivir eso vimos cómo dejaba su ego detrás de la puerta de ensayos y mostraba el interés por nosotros. Cuando nos dieron la noticia de que íbamos a estrenar en el Valle Inclán, sabíamos el núcleo de la historia pero no cómo se iba a contar. Hay que resaltar el que una institución pública confíe en una idea y en un equipo con rigor y una trayectoria. A veces pensamos que hay que una obra se tiene que estrenar, ir de gira, ver cómo va, alguien de una institución venga a verlo para que se programe. Aquí tenemos una idea efervescente aún, pero la historia se cerró ayer por así decirlo - hacia el 1 de de febrero y se estrenó el 6 de febrero -, y ahora - el 4 de febrero - nos va a dar un par de notas. Esta apuesta por una idea es lo que hemos vivido desde dentro en el equipo y desde la Institución. Ha sido gratificante.
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ZAIRA MONTES / CINSUELO TRUJILLO / EVARUFO FOTO : SUSANA MARTÍN |
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Los cambios no sólo han afectado al texto sino a todos los otros elementos escénicos: escenografía, iluminación, vestuario, siempre en beneficio de lo que los personajes necesitan y no de lo que los actores o el dramaturgo o el autor quiere para su obra.
En nuestra profesión se tiende a llevar el personaje a nosotros y se verbalizan cosas en el ensayo:"Es que no me sale decirlo así, ¿puedo decirlo de otra manera?" Aquí lo que hemos hecho es buscar en la historia qué es lo que hay debajo de esas palabras, dentro de una frase que, a lo mejor, yo no me identifico como Juan Vinuesa. Cuando empecé lo que podía tener similar con un minero es que de pequeño me gustaba Antonio Molina- canción Soy Minero, película -, pero todo lo demás lo he tenido que ir buscando. En todos nosotros, incluso en frases pequeñas, hemos tenido que descubrir qué es lo que se quiere decir y lo que hay debajo y no traerlos a un verbo más cotidiano. Ha sido un viaje de nosotros hacia el personaje y no traerlos a nosotros.
Juan subraya que en la obra hay una serie de antagónicos: norte contra sur, pasado contra presente, búsqueda de la identidad contra rechazo de la identidad, castellano contra catalán
Lo que ocurre es quedentro de todos estos antagónicos, los personajes tienen un elemento en peligro.Hay algo en juego. La escena puede significar un cambio para alguiende una manera o para otra persona. Siempre hay peligro. Ese peligro hace que los personajes estén vivos. Ese viaje en busca a la acción dramática es a lo que me refiere. Alberto no se ha dejado encantar por lo antagónico tan enfrentado, sino que ha buscado esa herida o ese elemento en peligro dentro de cada pequeña batalla de los personajes para formar una gran guerra. Por eso, desde dentro, al trabajarlo, sentimos que la cosa está viva.
ZAIRA MONTES, Beatriz (la madre de Joan) ES UN VIAJE DE COMPRENSIÓN Y DE AMOR
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ZAIRA MONTES FOTO: www.madridteatro.net |
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JOSÉ BUSTOS FOTO: www.madridteatro.net |
Zaira Montes actriz formada en William Layton y Centro de Artes Escénicas de Andalucía y ha trabajado en montajes dirigidos por José Carlos Plaza, Juan Vinuesa o Valery Tellechea, califica la función de muy delicada y con un texto muy frágil destacando el equilibrio que hay entre todos los personajes.
No hay un protagonista. Todos formamos parte de una geometría, cada uno ocupando su lugar con la responsabilidad que eso conlleva, pero de una manera muy equilibrada. Es un viaje de aceptación, de comprensión, del amor y de los vínculos que ocurre en casos concretos. Por ejemplo estamos sentados en los bancos laterales, porque nadie sale de escena y estamos viento todo el rato a los compañeros trabajar, y nos quedamos obnubilados con el trabajo de los compañeros. lo cual ayuda tantísimo a cargarse, a salir y a trabajar con el material que recibes, que aunque lo hayamos trabajado, Alberto ha sabido darle a cada uno su lugar. Todos somos protagonistas de esta historia y es la historia lo importante. Somos canales para contar la historia. De ahí viene la generosidad de Alberto de quitar textos y sin ningún apego, pues lo importante era transmitir lo que queríamos transmitir.
Referente a la incorporación del personaje Zaira lo define como rendición.
Me he rendido completamente a la idea o a creer en Alberto. Recuerdo que en la primera, segunda lectura y tercera lectura comprendía a Beatriz, y luego te metes en un maremagnun que dices: "No la comprendo". Te lías, hasta que al final te rindes y dices: "Bueno, me rindo", y se da una simbiosis entre tú como persona y el personaje y la comprensión mutua. Ha sido como un proceso de ir mucho a la esencia. A la desnudez.
JOSÉ BUSTOS, Joan (la pareja de Laia) HEMOS TENIDO QUE DEJAR NUESTRO "ACTOR" FUERA
José Bustos actor y pianista licenciado por la RESAD, formó parte de la compañía Guindalera en varios montajes dirigidos por Juan Pastor y ha trabajado además a las órdenes de directores como José Troncoso, José Maya, Diego Bagnera o Ángel Llácer, entre otros, reafirma la ausencia de ego en Alberto
Quitaba los textos y nos dolía más a nosotros que a él. Me he sentido muy contento porque hemos tenido que dejar nuestro "actor" fuera. El "actor" en esta obra no funciona. Es la humanidad del personaje lo que funciona. Si pones a tu "actor", como a veces hacemos, el personaje desaparece. Es poner nuestra humanidad al servicio del personaje. Normalmente los personajes empiezas a trabajarlo desde ti y a entenderlo desde ti. Mi personaje de Joan, no lo puedo entender desde mí. Soy incapaz. Esto te hace abrir tu mente ara descubrir que eres más grande o que el personaje es más grande que tu, pero te ayuda a engrandecerte para poder dar al personaje lo que realmente necesita. Todo este proceso comenzó en mayo de 2017 y lo estrenamos en febrero de 2019. En 45 días no hubiera sido posible. Sea bueno o malo lo verá el público, pero lo que nos ha aportado a nosotros, nos lo quedamos y va a estar con nosotros para siempre.
EVA RUFO, Laia (la pareja de Joan) ES UN DIÁLOGO DE TIEMPOS Y DE ESPACIOS
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EVA RUFO FOTO: www.madridteatro.net |
Eva Rufo, actriz licenciada por la RESAD, formó parte durante seis temporadas de la Joven Compañía Nacional de Teatro Clásico, y ha trabajado para gente como Magüy Mira, Ignacio Gª May, Salva Bolta o Ana Zamora, que la dirigió en el reconocido monólogo Penal de Ocaña (CLIKEAR) . Resalta la diversidad de elementos que dialogan en esta función.
Es un diálogo de tiempos, porque hay un pasado, un presente y un futuro. Se habla de tres generaciones de personas. Se habla de cómo entendiendo el pasado somos capaces de ordenar el presente, y así construir un futuro. Hay diálogo de espacios entre Norte y Sur, pues es un viaje desde Barcelona a Vilches. Es una obra muy sensorial porque hay tiempos, hay espacios y hay sonidos. Suenan distintas lenguas, y eso es un hallazgo, pues no recuerdo que haya funciones quede una manera tan natural se hablen distintas lenguas de nuestra geografía y distintos acentos. El grueso de la función transcurre en Vilches y hay un acento marcado del andaluz, pero también hay un catalán que se ha trabajado con total naturalidad. Es muy bonito oírnos como nació para entendernos también como sociedad. Hemos llegado con muy pocas certezas a esta función y gracias a eso nos ha hecho colocarnos en ese sitio de incertidumbre como actores. No era el momento ni el trabajo de habitar las palabras escritas por alguien ajeno sino reencontrar las juntos. Eso ha sido, para mí, el mayor aliciente de la función.
Otro de los aspectos que Eva resulta es la poética de Alberto.
Se podría pensar que es un impedimento para encontrar la verdad del personaje o los impulsos reales del actor. Ha sido todo lo contrario. Ha sido una vía brutal para encontrar la esencia de cada impulso, y en eso se ha comprometido de una manera bestial. Hemos ido al milímetro donde estaba el impulso perfecto y adecuado para darle vuelo a esa poética, a esa palabra que no está elegida porque sí. En realidad es un trabajo muy parecido con el verso. Encontrar dentro de una estructura, aparentemente lejana, la verdad del impulso.
JOSÉ TRONCOSO, Samuel (el que llega) ESTAR A DISPONIBILIDA DEL PERSONAJE
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JOSÉ TRONCOSO FOTO: www.madridteatro.net |
José Troncoso actor, director y profesor de interpretación, además de ser director de la Compañía La Estampida (autor y director de Las princesas del Pacífico (CLIKEAR). siente que ante la palabra de Alberto, se está haciendo algo importante.
La historia, por otro lado, es tan concreta, tan concreta en un sitio tan pequeño como Vilches que, de repente, se hace universal. Lo que les pasa a estos seis personajes que están completamente escacharrados son cosas que le pueden pasar a un sueco, a alguien del país vasco o a un catalán o a cualquiera. Habla de sentimientos, que es lo que tienen las grandes obras que perduran en el tiempo. Quiero recalcar una impresión del tiempo que cada vez más echo de menos en las producciones, y que es un sitio para que hay espacio para la confianza, par que no vayamos a un resultado y mostrar un algo en el primer día de ensayos. Hay que estar perdidos como nuestros personajes lo estaban y que esos personajes, en ese tiempo, puedan demandar sus necesidades e este proceso. osé insiste en que en este caso tienes que estar a disponibilidad del personaje. Hay que dejarse hacer. Hay que darlo todo. Abunda en la observación de Eva sobre la poética que ha sido un estudios exhaustivo porque
puede llevar a un sentido equivocado. Debajo de esa poesía se encuentra, muchas veces, un sentimiento mezquino, o deseo refrenable. Es muy fácil caer en la lírica en una primera lectura, por eso el tiempo que hemos empelado era necesario para que esas palabras se levantasen y cobrasen entidad.
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ZAIRA MONTES / JOSÉ TRONCOSO / JUAN VINUESA FOTO: SUSANA MARTÍN |
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