|
EGOMOTION
TRILOGÍA
AUTOBIOGRAFÍA IRÓNICA
YO ESTOY EN ESTE MUNDO
PORQUE TIENE QUE HABER DE TODO
YO NO SOY NADIE PERO ME CAGO EN TU PUTA MADRE
YO NO HABLO INGLÉS PERO A VECES ME LO PASO BIEN
SONIA GÓMEZ VA AFIANZÁNDOSE COMO
UNA CREADORA CON LENGUAJE PROPIO
|
Título: Egomotion (Trilogía).
Textos: Sonia Gómez
Música: OBK, The Cure, AciiDisco, ArvoPart, Lisabö, djRush
Visuales: Txalo Toloza y Rodrigo Espejo
Video clips: Núsria Lloansi
Iluminación: Òscar Sance
Creación y dirección: Sonia Gómez.
Interpretación: Sonia Gómez, Txalo Toloza, Sole Velasco.
Creación y dirección: Sonia Gómez.
Duración: 1 hora y 25 minutos
Estreno en Madrid: El Canto de la
Cabra,
2–VIII-2006. |
|
Vuelve Sonia Gómez a El Canto de la cabra, pocos meses después
de mostrar aquella insólita e incisiva performance titulada
Mi
madre y yo. En aquel espectáculo, la artista aparecía en escena
con su madre y se desarrollaba entre ellas un complejo proceso
que tenía mucho de reencuentro, de confidencia, de pugna -
ritual, cómica y violenta -, o de ajuste de cuentas, proceso que
se verificaba desde el humor y la ironía, aunque no estaba
exento de una cierta dosis de crueldad entreverada de una
perceptible ternura.
Sonia Gómez ha recibido una sólida formación en el ámbito de la
danza contemporánea, pero, como otras creadoras procedentes de
este campo, ha orientado su expresión artística hacia
territorios híbridos, difíciles de definir, pero que comparte
elementos del teatro-danza, de la performance, o de la
deconstrucción de diversas formas clásicas del espectáculo
escénico. Su trabajo con compañías como La Fura dels Baus,
General Eléctrica, La Carnicería teatro ha podido enseñar a
Sonia Gómez la fusión de lenguajes muy diferentes, las
posibilidades de una provocación inteligente corrosiva o el
desparpajo a la hora de expresar vivencias íntimas a las que se
despoja de su carga emocional e incluso de su propia privacidad.
Egomotion, el espectáculo que ahora muestra, es una trilogía
autobiográfica, que explora y revela las edades de la infancia,
la adolescencia y la juventud de la creadora, vertidas en un
lenguaje ácido e ingenuo a la vez, íntimo, despegado e irónico,
como sugieren los títulos respectivos de cada una de las partes:
Yo estoy en este mundo porque tiene que haber de todo
Yo no soy nadie pero me cago en tu puta madre
Yo no hablo inglés pero a veces me lo paso bien
|
La fórmula elegida es el relato directo al público, pero apoyado
por la presencia de otros dos actores que van encarnando algunos
de los distintos personajes que emergen de la narración o que
crean, teatral y distanciadamente, ambientes y situaciones
evocadas por el relato. Todo cobra así ese aire ingenuo e
irónico que parece caracterizar el quehacer de Sonia Gómez,
quien adopta una fingida indolencia ante los materiales
biográficos que muestra, como si se hablase de otra persona,
pero sin que ello le impida hurgar en lugares íntimos de la
memoria, que se presentan desprovistos de emoción alguna, sin
cortapisas ni fingidos pudores. El juego que combina el relato
con esa teatralidad deliberadamente elemental se completa con
las coreografías, originales y sugestivas, que ejecuta,
naturalmente, la propia Sonia Gómez, materiales a los que hay
que añadir las proyecciones y la música, que proporcionan ese
aire de collage característico de tantas performances
contemporáneas. |
El espectáculo resulta en su conjunto entrañable y simpático,
divertido y cómplice, pero también corrosivo y crítico,
extrañamente poético, imaginativo y veraz, aunque desigual, en
ocasiones. Parece más ingeniosa y elaborada la primera parte,
dedicada a la niñez, que las otras dos, más previsibles, quizás
por una cierta falta de distancia, aunque cuentan también con
momentos intensos y sorprendentes y, sobre todo, con soluciones
coreográficas vigorosas y sugestivas. En cualquier caso, Sonia
Gómez va afianzándose como una creadora con lenguaje propio, con
un discurso personal y con una energía y una audacia indudables
que presagian una interesante trayectoria que la artista ya ha
empezado a recorrer.
|