La lluvia amarilla. Imprimir
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Domingo, 14 de Marzo de 2010 07:41

LA LLUVIA AMARILLA
Versión teatral
de la novela de JULIO LLAMAZARES
en el TEATRO ESPAÑOL de MADRID

[2008-07-23]

Del 3 al 27 de julio de 2008


 

LA LLUVIA AMARILLA
Versión teatral
de la novela
de
JULIO LLAMAZARES

en el
TEATRO ESPAÑOL
de
MADRID

Del 3 al 27 de julio de 2008

La Sala Pequeña del Teatro Español, que hasta ahora cotiza llenos, vuelve una vez más con una novela. Antes fue Sin noticias de Gurb y ahora La lluvia amarilla del novelista Julio Llamazares, al cual no se le ha pasado por la imaginación el intervenir en la adaptación porque

  • …me sucede lo mismo que a los cirujanos que operan a otros pero no se atreven con sus hijos.

LA LLUVIA AMARILLA,
UNA NOVELA QUE SE ASOMÓ TÍMIDA
AL MUNDO EDITORIAL

La lluvia amarilla (1988), como novela, nació tímida en la primea edición. Si se vendían 1.000 ejemplares se podrían dar con un canto en los dientes. La realidad fue muy otra: van vendidos más de 400.000 ejemplares.

La lluvia amarilla narra, en primera persona, el paso fulminante, en los estertores de la muerte, de la película de los últimos diez años de la vida de Andrés, concretamente los años que transcurren entre el suicidio de Sabina, su esposa, y el ahora, momento en que la vida le abandona. Andrés visualiza la llegada de las gentes de otro pueblo. Lo encuentran muerto y lo entierran.
CHEMA DE MIGUEL BILBAO
FOTO: PEPE TORRENTE


AINIELLE

Todo esto sucede en Ainielle, un pueblo en la montañas del Pirineo de Huesca, que en 1971 quedó completamente abandonado, pero sus casas de mantuvieron en pie, pudriéndose en silencio, en medio del olvido y la nieve. Julio Llamazares en el preludio al capítulo 1 de su novela advierte

  • Ainielle existe

Fantasía del autor son sus personajes, aunque podrían ser los verdaderos.

LA LLUVIA AMARILLA,
UN PROYECTO ANTIGUO
QUE HA ENCONTRADO
EL KAIRÓS GRIEGO

Ahora nos llega como versión teatral dirigida por Emilio del Valle. Se estrenó en el octubre pasado en el Festival Periferia de Huesca y después ya ha recorrido un cierto periplo: los teatros de la red de Castilla-León y Castilla-La Mancha. Y ha funcionado. La última parada, de momento, es en la Sala Pequeña del Teatro Español.

  • Estamos muy contentos y honrados – declara Emilio -, de que nos hallan abierto las puertas de esta sala. Es un proyecto antiguo este de convertir en teatro el monólogo interior de la novela. Fue un hallazgo y esperé el tiempo oportuno – el Kairós de los griegos – para producirla. Tarea no fácil, porque había que mantener el gran nivel literario poético y conseguir el tiempo, pues el teatro tiene otro distinto al de novela, que se va leyendo día a día. Por eso encargué el trabajo de dramaturgia a José Ramón Fernández y la satisfacción es que Julio, autor, no ha echado nada en falta. Luego misión cumplida.

CHEMA DE MIGUEL BILBAO
FOTO: PEPE TORRENTE

ANDRÉS,
FUERA DEL CIRCUITO HUMANO

La novela está estructurada en 20 capítulos. En cuanto al tiempo el capítulo 1 es tiempo presente, el del narrador. A partir de aquí comienza un flashback – una vuelta al pasado – en presente, que nos traslada diez años atrás en la memoria de Andrés, hasta el suicidio de Sabina, su mujer. Los capítulos siguientes se suceden entre la memoria y el olvido que se acaba: un viaje hacia el final. En el capítulo 17 se vuelve a la acción del capítulo 1. Andrés imagina cómo los vecinos de los alrededores rescatan su cadáver para sepultarlo. Todo ello va expresado en forma de monólogo.


CHEMA DE MIGUEL BILBAO
FOTO: PEPE TORRENTE
  • No es popular hablar del mundo rural hoy – advierte Emilio -, pero nos toca contar la historia de un derrotado, una pérdida de identidad. Para mí ha sido un enorme placer hacerlo, por las palabras de la novela de Julio y por la interpretación de Chema tan vinculado al teatro y porque es de los grandes actores. Y quisiera resaltar la música que está muy ligada a la parte de la tierra.

INTENTAR CONSERVAR
LA MÚSICA DE LAS PALABRAS

José Ramón Fernández se encarga de la adaptación:

  • Yo había leído la novela en la Universidad y ahora me llega Emilio con el regalo de la novela de Julio. El criterio para traducir de un género a otro es el tocarlo lo menos posible, y sobre todo éste que es un texto de una calidad literaria difícil de igualar. Posee una música interior que sobrecoge. Mi trabajo ha consistido en conservar la música a pesar de tener que reducir el texto de forma cruel.

José Ramón Fernández tranquilizó su conciencia tras las palabras de Julio: No falta nada.

Al adaptar un texto cuando el autor está vivo es posible la tentación de consultar con el autor, pero es algo que José Ramón no se lo planteó porque…

  • …como adaptador he trabajado al servicio del director de escena que era Emilio y que es el creador del espectáculo teatral. De las 35.000 palabras lo hemos dejado en 9.000. Me da vergüenza meterme con el texto por la calidad literaria que posee y me da miedo destruirla.
  • La primera entrega de José Ramón – desvela Emilio fue de 13.000 palabras. “O haces algo, me dijo, pero yo ya no puedo seguir”. Después hubo un segundo corte dejándolo en 9.000 palabras, pero la hice yo.

CHEMA DE MIGUEL BILBAO
FOTO: PEPE TORRENTE

EN LA ADAPTACIÓN TEATRAL
NO ECHÉ NADA EN FALTA
ESTABA EL ESPÍRITU

Julio Llamazares nació en Vegamín, un pueblo hoy desaparecido de la provincia de León. No es casual, pues, que haya centrado la atención en otro pueblo desaparecido: Ainielle.

  • Emilio me propuso intervenir en la adaptación de la novela, pero me negué porque desconozco el lenguaje del teatro. Sólo he hecho algo en cine. Cuando la vi el día del estreno no eché nada en falta. Estaba el espíritu. Es una obra de gran delicadeza y musicalidad, por eso tenía una extraña curiosidad por la versión teatral, porque no sabía cómo se podía hacer.
A pesar de que Julio no había vuelto a leerla, las palabras eran de su propiedad y dormían en su interior y al emitirlas Andrés las iba recordando.
  • Ha sido una gran valentía el atreverse a montarla porque es una obra muy dura, ya que trata de la desaparición de un mundo y esto en una época en que prima la superficialidad. También abordar una obra que se titula La lluvia amarilla, un color, el amarillo, que es tabú en el teatro. Por eso es una doble valentía.
LA LLUVIA AMARILLA
(NOVELA)

ES LO MÁS DRAMÁTICO QUE HE HECHO
LA RESPUESTA DE LA GENTE ES INCREÍBLE

Chema de Miguel Bilabo es el campesino Andrés.
  • Es un grandísimo placer y sorpresa al mismo tiempo, cuando me lo propuso Emilio. Por mi parte ha sido un atrevimiento total por la calidad de la novela y por una dirección sin concesiones al espectador. Es lo más dramático que he hecho en mi vida y la respuesta de la gente es increíble. No se trata de una comedia que hace reir y sin embargo tiene respuesta del público. En Huesca la gente que había vivido la historia se reconocía en la obra.

CHEMA DE MIGUEL BILBAO
FOTO: PEPE TORRENTE

MÚSICA DE
INQUIETANTES Y HERMOSOS SONIDOS
EVOCADORES DEL MUNDO INTERIOR

Chema en su monologar va acompañado de una banda sonora en directo un tanto insólita, interpretada por Francisco Lumbreras. Se formó en el Conservatorio Profesional de Madrid, pero su interés por la música étnica y por las filosofías orientales le llevaron a tomar contacto con insólitos instrumentos para occidente: el didgeridoo que completó con el canto difónico o canto de armónicos y la musicoterapia. Aquí un instrumento protagonista es el didgeridoo, que para los profanos nos suena en una nota grave.

  • Es un instrumento de viento o aerófono ancestral – aclara Francisco utilizado por los aborígenes de Australia. Es un instrumento no melódico y polifónico, que emite una vibración grave y profunda. Esta vibración se puede modular y se le puede dotar de ritmo.

didgeridoo
  • Los sonidos son inquietantes, hermosos y tienen  mucho que ver con el mundo interior de Andrés y los pueblos abandonados donde sólo quedan los ecos – añade Emilio.

EL ESPACIO Y LA LUZ JUNTO CON LA PALABRA
EVOCADORES DEL PUEBLO PIRENAICO.

Quien en realidad es el protagonista es el pueblo de Ainielle, que queda fotografiado a través de las palabras de Andrés.

  • Lo hemos situado – precisa Emilio - , en la cocina-fuego, uno de los espacios más queridos por el personaje. Allí emplazamos el camastro, los recuerdos y los cuadros de Andrés. Entre la comida y el fuego, el camastro preside la soledad del personaje como si fuera un pequeño escenario. Es un espacio de 16 metros cuadrados y allí transcurrirá toda la historia.

Se recurre también a una serie de proyecciones un tanto peculiares.


CHEMA DE MIGUEL BILBAO
FOTO: PEPE TORRENTE
  • Las proyecciones, además de una puerta serán la luna, lugares de  estilo naif que Andrés recuerda. Todo lo que hay fuera de la casa. Los elementos escenográficos son orgánicos. No cabe el plástico ni en el atrezzo. Con ello pretendemos acercarnos a un modo de vida del  que todavía tenemos información. Intentamos que sea una estética con aroma antropológico.

LA PANA Y EL ALGODÓN
EVOCADORES DE LA ÉPOCA
Y EL PAISAJE

Esa línea de evocación ancestral se extiende al vestuario y…

  • …por eso el uso de la pana y el algodón con un colorido sacado de las fotografías y utilizando tintes orgánicos. Ello nos va a cercando a la paleta de verdes, pardos, marrones y grises que nos trasladan al mundo paisajístico del Pirineo.   

Importante es el uso de la luz, que en 16 metros cuadros se rebela a ser maleable.

  • Se trata con la luz de perder la escenografía cuando convenga y hacer vivir como si toda ella fuera el fuego al que Andrés se arrima para vencer el frío. Hemos tenido que trabajar con proyectores especiales y situarlos en lugares insólitos. José Manuel Guerra, su artífice, ha sido una pieza clave por su experiencia.

CHEMA DE MIGUEL BILBAO
FOTO: PEPE TORRENTE

EL FENÓMENO SOCIOLÓGICO
LA LLUVIA AMARILLA

La Lluvia amarilla, que vaticinaba ser patrimonio de unos pocos por su temática y dureza se ha convertido, durante estos años, en un fenómeno social y universal. Tal popularidad, para una novela calificada como novela difícil, triste y muy alejada del modo de vida actual que está inmersa en el consumo y lo mediático, no es fácil encontrar una razón satisfactoria. No obstante, Emilio piensa que:


AINIELLE
  • Probablemente su tema central, el abandono del mundo rural, es un tema de carácter antropológico que toca y une a mucha gente. Gente que se siente identificada con los pensamientos del autor. Y gente de todo el mundo, porque los movimientos migratorios afectan tanto a las zonas más ricas del planeta como a las más deprimidas.

La última novela de Julio Llamazares es El cielo de Madrid, publicada en 2005.

FUNCIÓN
De martes a sábado: 20:00 h.
Domingo: 18:00 h.


PRECIO
16 €
Martes y miércoles (día del epectador):
25 % de descuento


Título: La lluvia amarilla
Autor: Julio Llamazares
Dramaturgia: José Ramón Fernández
Dirección musical: Montserrat Muñoz
Escenografía: Francisco Ramírez
y Emilio del Valle
Iluminación: José Manuel Guerra
Vestuario: Ana Rodrigo
Dirección técnica: Francisco Ramírez
Espacio sonoro y audiovisual: Jorge Muñoz
Imagen de la obra: Bully
Realización escenografía, utilería y maquinaria: Francisco Ramírez
Técnico de iluminación: Eduardo Vizuete
Asesoría: Gómez Cuesta Asesores
Producción ejecutiva: Carolina Solas
Fotografía: Pepe Torrente
Ayudante de dirección: Jorge Muñoz
Distribución y gerencia: [in]constantesteatro
Compañía: Producciones Inconstantes
Intérpretes: Chema de Miguel Bilbao (Andrés), Francisco Lumbreras (músico)
Dirección: Emilio del Valle
Duración aproximada: 70 minutos
Estreno en Madrid: Teatro Español
(Sala Pequeña), 3 – VII - 2008



Teatro Español
Sala Pequeña
Director: Mario Gas
C/ Príncipe, 25
28012- Madrid
Concejalía de las Artes
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Tf. 91 3601484
Metro: Sevilla y Sol
Parking: Pz. Santa Ana,
Pz. Jacinto Benavente y Sevilla.
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Entradas: Sucursales de la Caixa de Cataluña
y Tel-entrada (24 horas) 902 10 12 12

 

Última actualización el Sábado, 01 de Mayo de 2010 11:51