Lady be Good! /Luna de miel... Critica Imprimir
Escrito por José R. Díaz Sande   
Miércoles, 11 de Febrero de 2015 18:25

 

LADY BE GOOD !
y
LUNA DE MIEL EN EL CAIRO
SIMPÁTICA VELADA MUSICAL

   lady6 B copia
   LADY BE GOOD!
FOTO: TZ

El Teatro de la Zarzuela ha programado un género que, tal vez, alguno pueda creer que no es apropiado para esta sede. La Historia del Teatro de la Zarzuela lo desmiente, pues este escenario, en otros tiempos, ha alojado a un variopinto número de géneros.

Lady be Good! y Luna de miel en El Cairo se encuadran en ese genérico que responde al calificativo de la opereta o la comedia musical. A los dos títulos les separan el Océano Atlántico y  las fechas de estreno: Lady pertenece a EEUU (New York) y a 1924, mientras que La Luna a España (Madrid) y a 1943. El incluirlas juntas en la programación del Teatro de la Zarzuela entra dentro del proyecto más amplio de Teatro Musical, y, en concreto, el que pueden ostentar el apelativo de comedia musical u opereta.

Así como España en esto del musical tiene como propio la zarzuela, EEUU ha sido el creador de la comedia musical. No es el momento de un ensayo o estudio sobre tales conceptos, pero sólo apuntar que tienen como parentesco el que se trata de argumentos de comedia o comedia dramática que alterna números cantados y parte hablada. Donde más se diferencian es en la partitura musical. La zarzuela prefiere la escuela bel cantista italiana con su toques de melodías españolas, mientras que la comedia musical americana, sin olvidar el aspecto lírico, no bel cantistas sino más cercano a la canción melódica,  en algunos de sus números, echa mano de ritmos  jazzísticos o folk. Otro de los elementos diferenciadores es que la comedia musical americana ha incorporado desde el principio el baile y el canto. Sus canciones de solistas y coros acuden al movimiento más o menos bailable. La zarzuela, salvo en estos últimos tiempos para emular la comedia musical americana, ha centrado su interés en el canto, y los bailables, que siempre los ha habido, entraban como ilustración de una danza pero no formando matrimonio con la canción solista o la de los coros.

Cuando la zarzuela inició su decadencia y los gustos musicales norteamericanos fascinaban al público europeo y, en concreto, al español, algunos compositores españoles de zarzuela, entre ellos Francisco Alonso, se inclinaron por la llamada opereta y la comedia musical, así como cobró protagonismo la Revista. Este es el caso de Luna de miel en el Cairo, una opereta con toques arrevistados.

Emilio Sagi se ha encargado de dirigir los dos títulos y para ello ha comenzado por aligerar la parte hablada, eliminando ciertos desfases. Las ha peinado, como se dice en el mundillo teatral. De las dos obras el argumento - en ambas un argumento de poca trascendencia - Lady Be Good! tiene más congruencia y entidad. Luna de miel en el Cairo posee un primer acto bien trazado argumentalmente - una Compañía de Operetas va montar una y se requiere audiciones y ensayos -, en el que aparecen la presentación de los personajes y su futuribles relaciones amorosas, pero aterriza en un segundo acto un tanto confuso. Asistimos al ensayo general con decorados y vestuario de uno de los actos de la tal Opereta en la que se desarrolla una trama caricaturesca a la que se le pone punto final. En este desarrollo de la ficción del segundo acto  - es teatro dentro del teatro - nos hemos olvidado de la trama apuntada en el primer acto, y terminado el ensayo general, todo se resuelve de un modo precipitado y se disuelve en la nada. Es tal la sensación de que la historia del primer acto ha quedado como incompleta, que, al menos a mí, me coge desprevenido el final de fiesta, los obligados saludos a ritmo musical, palmeras incluidas. Me temo que en ese peinado del texto, se ha utilizado una maquinilla con la medida cero.

Tema aparte es el aspecto musical. Éste se ha respetado, prácticamente, en su integridad  y en el caso de Luna de miel en El Cairo se ha sustituido algún número por otro. Las dos obras, cada una en su estilo, nos ofrecen melodías muy agradables, que cuentan con una muy buena interpretación por parte de los cantantes y por la orquesta que Kevin Farrell dirige con ritmo y buena sonoridad.

La obra de Gershwim, Lady be Good!, a pesar de los años, sigue manteniendo un modernismo y ritmo que nos sigue fascinando. Por otro lado, hemos visto tantas películas musicales en donde entraban las melodías del compositor, que su música nos es altamente familiar. La obra fue compuesta para los bailarines Adela y Fred Astaire, que también cantaban. En esta ocasión, en las dos obras, se ha recurrido a cantantes líricos y por aquello de más difícil todavía, cantantes de ópera. Digo lo de más difícil todavía, porque de todos es sabido que la vocalización operística, por su redondeo vocal, dista bastante de la de la comedia musical, más abierta y con menos prosopopeya. Por decirlo de una vez no sólo salen triunfantes, sino que se agradece la sonoridad de las voces que han conseguido aunar, tanto en una obra como en otra, calidad canora y naturalidad. Al poder contar con tal calidad de voces, imagino, no ha habido que transportar voces pues éstas juegan con una amplia tesitura vocal. Se ha ido más lejos, en el caso de Luna de Miel en el Cairo Mariola Cantarero se permite algunos agudos virtuosos con su obligado florilegio.

En Lady be Good! , interpretada en inglés, Nicholas Garret (Dick Trevor) y Jeni Bern (Susie Trevor) son dos voces de buena calidad que se atreven con unos discretos pasos bailables, de los que salen bien parados. Indudablemente no son Adela ni Fred, pero Emilio Sagi lo ha resuelto de un modo inteligente. No ha olvidado el bailable de los hermanos Astaire. Tras unos compases por parte de los protagonistas, entran, sin solución de continuidad, el grupo de bailarines que arropan bien el bailable con atractivas coreografías que la coreógrafa Nuria Castejón ha creado con acierto. Este mismo juego de lo canoro y lo bailable lo ha trasladado al Coro. Consigue una fusión de los dos conjuntos, el coro y el cuerpo de baile, de modo que cada uno de ellos cobra protagonismo, sin que notemos el forzamiento del paso de uno a otro.

Talía Del Val (Shirley Vernon) y Sergio Herrero (Ronald Parker), cantantes de comedia musical, se tienen que enfrentar a cantar a pelo, sin micrófono, y salen bien parados.

El ritmo musical Emilio lo traslada a toda la escena mediante el continuo movimiento de todos los personajes, incluidos los sofás. La escena es un brillante calidoscopio en continuo movimiento.

En Luna de miel en el Cairo la interpretación canora adquiere, también, cotas altas. Asombra Mariola Cantarero, no por su calidad vocal que eso se daba por seguro, sino por la acomodación de su voz a lo que podría ser tiple cómica. A este aspecto musical se añade una gran capacidad histriónica cómica que arrancó más de un aplauso. Mariola ha jugado con su gracejo y acento "granaíno" - ella es de Graná -, acento que, lógicamente oculta en sus óperas y zarzuelas. A Ruth Iniesta le toca el papel de la chica buena y formal. Llama la atención la claridad de vocalización y el buen timbrado de su voz. El barítono David Menéndez, en el papel del protagonista Eduardo, es una voz densa y pletórica que se acopla bien a su personaje. Enrique Viana despliega simpatía en su personaje cómico al que aporta una melodiosa voz.

El coro, tanto en una obra como en otra, muestran una calidad vocal muy apta para este estilo musical.

Hay que alabar el espacio escénico  de Daniel Blanco, lleno de evocaciones ambientales y, al mismo tiempo, de fastuosidad. Lo mismo sucede con el vestuario de Jesús Ruiz, que ha ideado unos trajes inspirados en las épocas de cuando transcurre la acción, pero estilizándolos y fantaseando sobre ellos. Es un derroche de colorido.

El público del 7 de febrero aplaudió en diversos momentos con entusiasmo y lo corroboró al final. Una velada agradable, simpática y plena de humor, que muestran la capacidad interpretativa de todos. La dirección de Emilio llena de ritmo a todo el espectáculo y sabe sacar de los cantantes su lado más cómico y flexible a nivel interpretativo. Este montaje aleja aquel antiguo prejuicio de que los cantantes líricos son pesos pesados como intérpretes.

   luna5 B copia
   LUNA DE MIEL EN EL CAIRO
FOTO: TZ

Títulos:
Lady be Good!
Musical en dos actos de Guy Bolton y Fred Thompson
Música y letras de George Gershwim ye Ira Gershwim
Estrenado en el Liberty Theater de Nueva York, el 1 de diciembre de 1924

Luna de miel en el Cairo
Opereta en dos actos de José Muñoz Román
Música de Francisco Alonso
Estrenada en el Teatro Martín de Madrid el 6 de febrero de 1943

Versiones escénicas: Emilio Sagi
Escenografía:Daniel Bianco
Vestuario:Jesús Ruiz
Coreografía:Nuria Castejón
Iluminación:Eduardo Bravo
Maestro repetidor:Roberto Balistreri
Asistente de dirección musical:Craig Barna
Ayudante de dirección de escena:Javier Ulacia
Ayudante de escenografía:David Rodríguez
Ayudante de vestuario:Isabel Cámara
Ayudante de iluminación:Antonio Castro
Asistente de dirección de escena:Diniz Sanchez
Producción:Teatro de la Zarzuela
Bailarines:Cristina Arias, Remedios Domingo, Antonio Corredera, María Ángeles Ferrer, Alberto Ferrero, Olivia Juberías, Joaquín León, Ricardo López, Helena Martín, Daniel Morillo, Silvia Rincón, Luis Romero, Cristhian Sandoval, Rosa Zaragoza

Orquesta de la Comunidad de MadridTitular del Teatro de la Zarzuela
Coro del Teatro de la Zarzuela

Intérpretes:
Lady, be good!(Reparto)
Nicholas Garret (Dick Trevor), Jeni Bern (Susie Trevor), Gurutze Beitia (Josephine Vanderwater), Troy Cook (Watty Watkins), Sebastià Peris (Bertie Basset), Letitia Singleton (Daisy Park), Carl Danielsen (Jeff White), Paris Martin (Jack Robinson), Talía Del Val (Shirley Vernon), Manel Estève (Manuel Estrada), Sergio Herrero (Ronald Parker)

Luna de Miel en El Cairo(Reparto)
David Menéndez (Eduardo), Enrique Viana (Rufi), Manel Estève (Regidor/Secretario), Eduardo Carranza (Don Celestino/Ministro De Lymburgo), Mariola Cantarero (Myrna), Ruth Iniesta (Martha), María José Suárez (Marisa, La Sastra/Márgara), Celsa Tamayo (Pianista), Isabel González*(Lucía Sánchez/ Chica 1), Paloma Curros* (Chica 2/Hilda), Carmen Gaviria* (Chica 3/Zelda), Remedios Domingo  (Rosarito Alzada)

* Miembro Del Coro Del Teatro De La Zarzuela

Director del coro:Antonio Fauró
Dirección musical:Kevin Farrell
Dirección de escena:Emilio Sagi
Duración:Lady, be Good, 1 hora y 20 minutos / Descanso 20 minutos / Luna de mil en El Cairo: 1 hora y 15 minutos.
Estreno en Madrid:Teatro de la Zarzuela, 31 - I - 2015

Más información
   
Lady be Good! Luna de miel en El Cairo
   Lady ... / Luna de miel.. Entrevista
 
  Historia de la Revista I. Estudio

   Historia de la Revista II. Estudio

José Ramón Díaz Sande
Copyright©diazsande

 

 

 

 

Última actualización el Miércoles, 11 de Febrero de 2015 18:59