LAS COSAS QUE SÉ QUE SON VERDAD texto ANDREW BOVELL adaptación JORGE MURIEL intérpretes VERÓNICA FORQUÉ, JULIO VÉLEZ, PILAR GÓMEZ, JORGE MURIEL, BORJA MAESTRE, CANDELA SALGUERO dirección JULIÁN FUENTES RETA en los TEATROS DEL CANAL (SALA VERDE) de MADRID Del 30 de noviembre al 15 de diciembre

Al autor australiano Andrew Bovell lo conocimos Cuando deje de llover (CLIKEAR), ganadora de tres Premios Max en 2015 al mejor espectáculo de teatro, mejor dirección de escena y mejor actriz de reparto. Vuelve de nuevo Andrew Bovel con otro texto, Las cosas que sé que son verdad, dirigida por Julián Fuentes Reta y adaptada por Jorge Muriel, el mismo equipo de entonces. Verónica Forqué encabeza el reparto, seguida de  Julio Vélez, Jorge Muriel, Pilar Gómez, Borja Maestre y Candela Salguero.

JORGE MURIEL / PILAR GÓMEZ / JULIO VÉLEZ / VERÓNICA FORQUÉ / BORJA MAESTRE / CANDELA SALGUERO FOTO: PRODUCTORA

En una casa suburbana, con un pequeño, jardín, una familia de clase media afronta el paso de un año decisivo. A través de la metáfora material del transcurso de las cuatro estaciones que condensarán el crecimiento y cambio de cuatro hermanos y hermanas y sus vínculos con su padre y su madre, asistiremos al desarrollo de un organismo que mutará, se agitará y morirá, para seguir, siempre, incontenible e imparable, respirando y transformándose.

LA VIOLENTA IRREALIDAD
DE NUESTRA VIDA COTIDIANA

	JULIAN FUENTES RETA FOTO: JAVIER NAVAL

Julián Fuentes Reta, que ya dirigió Cuando deje de llover (CLIKEAR), dirige este nuevo título. Tras la exitosa gira de Cuando deje de llover (CLIKEAR), el equipo leyó la nueva obra de Bovell  y sintió la urgencia de subirla al escenario. Según las propias declaraciones de Bovell es importante el tema de no dejar pasar el tiempo en un obra y otra ya que hay un foco central en ambas: la familia. Julián Fuentes Reta precisa  

Aunque si es cierto que Andrew escribe sobre lo que siente y lo que ve, creo que el foco del trabajo de Andrew es el tesón mismo, la fuerza del no abandonar nunca, como imagen dinámica en el tiempo. Sus piezas exploran minuciosamente el paso del tiempo y los cambios de los seres que se desarrollan en él, las nutridas elaboraciones que la lluvia, los abrazos, cientos de puestas de sol y amaneceres, dejan en la piel, en el gesto, en la experiencia. Andrew es un caminante tenaz y persistente, y sus piezas muestran precisamente eso. Nunca había encontrado una dramaturgia que expusiera la violenta irrealidad de nuestra vida cotidiana como la suya. Llena de muerte, de violencia, de ternura, de todo lo que se dice en secreto o apenas no se dice, de todo lo que tapamos diariamente para llamar a nuestra vida “normal” y nivelarla con la apariencia de “normalidad” de todos los demás. Andrew describe la vida de todos, la vida secreta de todos. Y aquí, por supuesto, el foco parece estar en la familia, sea consanguínea o no.

En Cuando deje de llover (CLIKEAR), se viajaba en el tiempo a través de cuatro generaciones. En Las cosas que sé que son verdad a través de un año, y sus cuatro estaciones. Con todo, para Julián el foco no es la familia:

Andrew escribe sobre el misterio de las mutaciones. Sobre cómo cambiamos. Por eso, trabajar con él a través del tiempo y los empeños, produce una satisfacción que no he encontrado con ningún otro autor. Porque, con cada proyecto, avanzamos, y en cada proyecto, retratamos lo que vemos. En este, su título lo sumariza todo. En España a 2019, estas son las cosas que sabemos que son verdad.

JORGE MURIEL FOTO: www.madridteatro.net

JORGE MURIEL, traductor y adaptador
LO DIFÍCIL QUE ES SER PADRE
Y LO DIFÍCIL QUE ES SER HIJO

Jorge Muriel, ya había traducido Cuando deje de llover (CLIKEAR) y en Las cosas que sé que son verdad también es actor, pero también el traductor y el adaptador. Para él se trata de dos obras muy diferentes.

Es verdad que tiene la misma sensibilidad, vuelve a habar sobre la familia, pero esta vez es sobre una única familia. Cuando deje de llover era algo más épico, y esto es mucho más íntimo, pero tiene la misma profundidad. Habla de lo difícil que es ser padre y de lo difícil que, a veces, es ser hijo y poder ser tú mismo más allá de lo que  tus padres esperan de ti.  

En el reparto Verónica Forqué interpreta a la madre, la cual parece ser el centro de toda la situación más que el padre. 

En realidad son los dos, quienes llevan la situación. La Madre es una madre que, como se dice  en la obra, es "la que lleva los pantalones", pero está muy equilibrado el papel de padre y madre. Esta es una de las grandezas de Andrew. No es sólo la madre la protagonista, sino que va más bien de un "tamdem " padre y madre y qué lugar ocupa cada uno. También qué lugar ocupa cada hijo. Son cuatro hijos entre los que hay una  diversidad muy grande.

	VERÓNICA FORQUÉ FOTO: www.madridteatro.net

Verónica Forqué, en general, tiene un sello propio en la interpretación que discretamente y según convenga aplica a sus personajes. Sabe jugar muy bien entre el realismo, la comicidad y un cierto surrealismo teñido de despiste. Al espectador le cae bien, tanto en teatro, cine o televisión. En esta ocasión Jorge precisa que

por guión el personaje de la madre  no lo tiene. Andrew ha venido esta semana y Verónica compone el personaje  como ella lo ve con aprobación de Andrew y de Julián. Lo construye a su forma, pero va a sorprender los giros que tiene el personaje, donde Verónica se está metiendo. Es un personaje más distinto al que estamos habituados a verla. Luego tiene ese toque particular, y creo que si se pueden fusionar todos estos elementos puede resultar muy bonito y muy creíble.

¿FAMILIA ESTRUCTURADA?

A primera vista esa familia australiana que se nos presenta, a pesar de las desavenencias, aparece como una familia estructurada, mientras que actualmente nuestras familias están más desestructuradas.

PILAR GÓMEZ
CANDELA SALGUERO / BORJA MAESTRE FOTO: www.madridteatro.net

Es cierto que la familia actual está más desestructurada, pero cuando leí la obra me sentí muy identificado con mi familia. Mis padres tienen tres hijos, Andrew tiene tres hijos… Cuando tiene tres o cuatro hijos hay algo por lo que la casa familiar es un poco el lugar de encuentro. No creo que  Andrew refleje una familia australiana, sino que  quería hablar de una familia que tiene más de dos hijos. Entonces hay algo muy bullicioso que supone mayor diversidad. En escena de la presentación de la familia hay una mayor  armonía, pero a medida que transcurre la historia, no se vuelven a juntar. Hay una desestructuración. Cada hijo viene con su problema y lo confronta con los padres porque es con quien lo tiene que confrontar. Lo que sí creo es que está muy bien como contraposición al anhelo de unidad, que, a veces, es ficticia y en la propia escena también lo es, porque lo que te sale son los roces entre los hermanos, las envidias, los favoritismos…En el fondo es el círculo vicioso en el que entras, y como hijo te sientes coartado. Es como la Cena de Navidad en familia. Tienes que ir y sabes el lugar que ocupas, una etiqueta y un prejuicio que durante un año se te ha asignado. Por un lado lo amas y por otro lo detestas.     

AROMA DE TENESSE WILLIAMS

En una mirada un  tanto fugaz en el pase gráfico Las cosas que sé que son verdad exuda un aroma de Tenesse Williams, Arthur Miller y demás autores norteamericanos de los años cuarenta y cincuenta del siglo XX que nos mostraban conflictos familiares.

¡Qué bonito que lo digas! No lo había pensado, pero te doy toda la razón. Ahora que lo has dicho, creo que tiene esa poética y esa belleza de las obras de Tenesse Williams. Tiene esa fina línea entre el melodrama y el drama. Nuestra intención es poder llegar  al drama y que no se quede en el melodrama, pero has acertado plenamente. Ahora que lo ha dicho, para mí si se mueve entre lo profundo y lo poético, y, en la obra, Andrew le da mucha importancia al jardín: a las estaciones que ocurren en ese jardín como metáfora  de la continuidad y de cómo todo va pasando. Es algo que Tenesse Williams tenía mucho en sus obras.    

UNA SUTIL ADAPTACIÓN

	CANDELA SALGUERO
	CANDELA SALGUERO / JORGE MURIEL FOTOS: www.madridteatro.net

En esta ocasión Jorge aparece como adaptador además de traductor, aunque precisa que la adaptación

ha sido muy sutil. Fue un acuerdo que hablamos Andrew y yo con la idea de  Julián, el director, de quitar localismos. Es una obra muy universal. Podría ocurrir en cualquier ciudad. Andrew las había situado en Adelaida (Australia), su ciudad natal. Entonces hemos quitado nombres, cambiar alguna cosita, pero es mínima.

CUANDO DEJE DE LLOVER A CUATRO BANDAS
Y CON UN GIRAR ESCÉNICO EN EL MATADERO    

Cuando deje de llover (CLIKEAR) se estrenó en la Naves del Español, el Matadero, a cuatro bandas. Tenía algo sorprendente: el espacio giraba, pero no al uso mediante una plataforma giratoria, sino que los actores trasladaban el mobiliario destruyendo el teatro a la italiana. Puesta en escena que no pudieron mantener durante la gira, teniendo que conformarse con el teatro a la italiana. En esta ocasión también va a cuatro bandas

En el original no está concebido a cuatro bandas. Eso fue una idea de Julián que al ver el espacio polivalente de la Sala Verde de  los Teatros del Canal y la posibilidad de jugar a cuatro bandas comentaron que nunca se había hecho así. Como es verdad que es una obra  que vuelve a englobarnos a todos dentro de una familia y teniendo el privilegio de un teatro que se puede hacer así, pues hemos optado por ello. Creo que lo que te ayuda es que el público te englobe y te haga formar mayor parte de lo que se está hablando y del tema crucial. También las cuatro bandas es estar como en un "ring". En la obra hay mucho conflicto, pues cada hijo tiene un conflicto que trae a la familia y le hace evolucionar. La idea de las cuatro bandas, del ring,  de un  público como espectador, pero, al mismo tiempo, te hace espalda nos gustaba un poco volver a hacerlo. Después en gira ya tenemos que volver a hacerlo a la italiana. Solamente en el Teatro Central de Sevilla volvemos a poder hacerlo a cuatro bandas.

UNA SINGULAR ESCENOGRAFÍA

La escenografía supone una casa familiar, pero con una concepción un tanto peculiar: Un retazo central cuadrangular plagado de ramos de rosas en pie y en lo alto un gran árbol frondoso cabeza abajo que sugiere un sinfín de simbolismos. Entre ellos el estar presionado sobre la familia.

En la obra estaba que en el centro del jardín hay un árbol, pero, para mí, la simbología es el que  la familia está arraigada. Te puede dar raíces, pero te puede dar ramas. Te lleva al subsuelo, pero también te sube al cielo. Colocar ese árbol en cada uno de nosotros es el trabajo vital que tenemos. Esa cosa del amor-odio hacia la familia está presente siempre. La amas y quieres huir. Por otro lado el árbol se menciona mucho en los monólogos de los personajes y, para mí, significa la familia.

JORGE MURIEL / PILAR GÓMEZ / JULIO VÉLEZ / VERÓNICA FORQUÉ / BORJA MAESTRE / CANDELA SALGUERO FOTO: www.madridteatro.net

JORGE VUELVE COMO INTÉRPRETE

En Cuando deje de llover (CLIKEAR) Jorge además de traductor interpretaba uno de los personajes, Gabriel Law. Aquí también vuelve como intérprete y decidirse fue

una propuesta de Andrew. Vio Cuando deje de llover (CLIKEAR), y le gustó mucho. Acababa de estrenar esta obra en Londres y nos la ofreció proponiendo a tres actores: Pilar Gómez podía hacer de la hermana mayor, yo podía hacer el segundo  y  Borja Maestre  el tercer hermano. Luego hay una cuarta hermana, más jovencita que ha sido como el penalti descolgado por razones que luego explica la obra y la interpreta Candela Salguero. La verdad es que mi personaje es un reto, muy bonito y está siendo un regalo. Todos los personajes tienen como algo muy hermoso.

PUESTA DE ESCENA A CUATRO BANDAS FOTO: www.madridteatro.net

ESTRENO ABSOLUTO EN MADRID
Y GIRA ASEGURADA

La obra es estreno absoluto en Madrid. Al estar coproducido por un teatro público como son los Teatros del Canal, se cuenta solamente  con 45 días de ensayo.

Eso te hace llegar con la lengua afuera. Además es un montaje con mucha dificultad técnica y estamos un poco en pañales (antes del estreno). Afortunadamente como está Verónica Forqué es un privilegio, porque tenemos un año entero vendido. Hasta el otoño de 2020 hay bolos. Va a ser muy bonito contar la obra en ciudades pequeñas y en casi toda España. También es una gran responsabilidad.

FUNCIÓN
De martes a sábados: 20:00 h
Domingos: 18:00 h
Funciones accesibles
 14 y 15 de diciembre
Este espectáculo hace uso de luces estroboscópicas

PRECIO
De 17 € a 14 €
Descuentos
Mayores de 65 y desempleados: 15€/ 13€
Carné Joven y menores de 30 años: 10€/ 9€
Profesionales de las artes escénicas y Asociaciones:10€/ 9€
Grupos: 12€/ 10€

	CANDELA SALGUERO / JULIO VÉLEZ
	JULIO VÉLEZ / CANDELA SALGUERO / VERÓNICA FORQUÉ / JORGE MURIEL FOTOS: www.madridteatro.net

Título: Las cosas que sé que son verdad
Texto: Andrew Bovell
Las cosas que sé que son verdad fue producida por primera vez por The State Theatre Company en el sur de Australia y por Frantic Assembly en 2016
Adaptación y traducción: Jorge Muriel
Escenografía: Julián Fuentes Reta y Coro Bonsón
Iluminación: Irene Cantero
Música: Ana Villa y Juanjo Valmorisco
Diseño y fotografías: Javier Naval
Vestuario: Carmen 17
Ayudante de dirección: Angelina Mrakic
Producción ejecutiva: Fabián Ojeda
Coproducción: Octubre Producciones y Teatros del Canal
Con la colaboración de: Flower Power Producciones
Dirección de producción: Nadia Corral
La presentación de Las cosas que sé que son verdad en Madrid cuenta con la colaboración de Teatros del Canal
Intérpretes: Verónica Forqué (madre), Julio Vélez (padre), Pilar Gómez (hermana mayor), Jorge Muriel (segundo hermano), Borja Maestre (tercer hermano), Candela Salguero (hermana pequeña)
Dirección: Julián Fuentes Reta
Duración: 2 h.
37 Festival de Otoño de la Comunidad de Madrid.
País: España
Idioma: español
Género: teatro
Estreno en Madrid (Estreno absoluto): Teatros del Canal (Sala Verde), 30 - XI - 2019

Más información             José Ramón Díaz Sande Copyright©diazsande

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