Una noche sin luna. Botto-Mencheta -Curt. TE Imprimir
Escrito por José R. Díaz Sande   
Jueves, 17 de Junio de 2021 11:59

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UNA NOCHE SIN LUNA

texto e interpretación
JUAN DIEGO BOTO 

dirección
SERGIO PERIS-MENCHETA

música original
ALEJANDRO PELAYO

escenografía
CURT ALLEN WILMER

en el
TEATRO ESPAÑOL
(SALA PRINCIPAL)
de
MADRID 

Del 17 de junio al 11 de julio de 2021


Una noche sin luna  habla de Lorca desde una sensibilidad del siglo XXI, como si el propio Federico estuviera hoy entre nosotros

Una noche sin luna nos descubre los aspectos menos conocidos de la vida y obra del poeta, al que da vida Juan Diego Botto

- El tándem artístico Botto / Peris-Mencheta vuelve al Teatro Español después del éxito de Un trozo invisible de este mundoganadora de 4 Premios Max

- Un espectáculo que, a partir de la figura del poeta, no deja de ser una pieza sobre la actualidad social, cultural y humana de nuestros días.

En 2012 en las Naves del Español se estrenaba Un trozo invisible de este mundo (CLICK).  Ganó 4 Premios Max.  El tándem artístico era Juan Diego Botto, como autor e intérprete, y Sergio Peris-Mencheta como director. Ahora vuelven ambos con Una noche sin luna, rodeados del mismo equipo artístico de entonces.

Una noche sin luna propone un recorrido por algunos años en la vida de Lorca mediante  la mezclas de su vida con el tiempo presente en un juego de espejos e ilusiones. El viaje no es un viaje arqueológico, sino una forma de conocer, a través de su obra, nuestra propia realidad. De esta manera, la obra se convierte en una pieza viva, atrevida y dinámica en la que la palabra de Lorca, su vida y su mundo, sirven de espejo del nuestro.

DE UN RECITAL A UN TEXTO DRAMÁTICO

Una noche sin luna nace de un deseo, por parte de Juan Diego Boto, de ofrecer un recital de poemas, charlas y conferencias de Lorca.  Al recopilar material y leer biografías de Lorca, Juan Diego se topó que en la vida de Lorca resonaban ecos que vibraban en nuestro presente.

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   JUAN DIEGO BOTTO
FOTO 1: marcosGPunto
FOTO 2: www.madridteatro.net

Sentí que en las decisiones que tuvo que tomar, en los momentos que le tocó vivir, en la encrucijadas por las que transitó, que, de alguna manera, podría reflejar nuestra realidad. A partir de ahí decidí abandonar la idea de un recital y escribir una obra que recogiera ese todo de espejos entre las decisiones que fue tomando Lorca durante su vida y fundamentalmente en los últimos años, y como resonaba en nuestra actualidad. Siempre con la voluntad de que estuviera vivo y fuera presente. Mirar hacia atrás para hacer un edificio arqueológico nunca tuvo mucho sentido, y el viaje hacia atrás sirve cuando ese pasado con el que miras dialoga con de forma presente con la actualidad.

UN LÍNEA DE TELÉFONO A 300 METROS
Y UNA CAFETERÍA A MITAD DE CAMINO

Con un primer borrador y una apuntada idea de estructura telefoneó a Sergio Peris-Mencheta, el cual vive a unos 300 metros de la casa de Juan Diego. No tenía ninguna duda de que lo dirigiera Sergio, sobre todo después de la premiada experiencia: Un trozo invisible de este mundo (CLICK). Se citaron en una cafetería, a medio camino, para comer y le contó la historia.

Yo siempre imaginé este texto como una pieza para dos actores, pero ese día, tras decirme que le gustaba mucho, me dijo: "Esto claramente es un monólogo". Yo tenía clarísimo que no era un monólogo. Sabía pocas cosas, pero estaba convencido de que no era un monólogo. Le dije: "Lo voy a escribir, lo les y te darás cuenta de que no es un monólogo" Le fui entregando diversas versiones. Fuimos trabajando y hablando. Cada vez que le presentaba una versión nueva, decía:"Está muy bien, pero esto es un monólogo".  Estuvimos dos años y medio metidos en este trabajo, y al final le dije "Voy a escribirlo todo en  monólogo y verás que esto no funciona como monólogo". Hice esta versión y me di cuenta de que se establecía un código desde el principio, que se rompía cuando entraba el otro actor. Así que la colaboración ha sido desde que la historia estaba pergeñada.

Sergio Peris-Mencheta ve en Juan Diego Boto a un auténtico "cuenta cuentos" ya que, en su opinión, es un gran narrador, ya que cuenta muy bien las cosas.

Ha contado cuentos a un montón de niños y luego sabe narrar bien y de forma potente. En Rayuela, la cafetería en donde quedamos, me contó la historia que me fascinó como relato y cómo me la contó. Le dije: "No sé hasta qué punto me vas a necesitar, porque te sientas en una silla como acabas de hacer, la cuentas y ya la tenemos". Por eso insistí  en lo del monólogo, porque sólo veía a él, no veía más actores en escena. Según me lo iba contando veía la posibilidad de una puesta en  escena que luego no fue. Yo me ilusiono siempre con las posibilidades. Me iba ilusionando con la forma, porque el fondo era una maravilla.

Durante la creación del espectáculo han tenido muchos viajes y coincidiendo poco. Juan Diego estuvo una temporada en la casa de Sergio en Los Ángeles y pudieron avanzar mucho, al mismo tiempo que se fraguó que fuera un único actor: él. Había también una banda de música que se descartó. El texto y la puesta en escena iban conjuntamente creciendo, y se podría decir que era una pieza ejecutada a dos manos.  

PIEZA EJECUTADA A TRES MANOS
JUAN, SERGIO Y CURT

En una segunda fase se convirtió en una pieza ejecutada a tres manos, que es cuando intervino el escenógrafo Curt Allen Wilmer.

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  SERGIO PÉREZ-MENCHETA
FOTO 1: marcosGPunto
FOTO 2: www.madridteatro.net

Con la entrada de Curt en el proyecto se terminó de concretar lo que yo llamo el "riel de la historia": Por aquí vamos a ir. Desde el principio había una idea en base a tres ejes: el pasado y el presente en ese paralelismo de aquellos maravillosos años veinte  y nuestros años veinte en cuanto los ecos que están resonando; luego el "adentro" y "fuera" del teatro lorquiano, en cuanto que mientras estamos haciendo la obra hay algo que está pasando fuera, y cómo el teatro tiene que ser un reflejo de lo que está pasando fuera; luego el "arriba" y el "abajo", las tablas y lo que está debajo de las tablas que no se ve que también hace referencia a todos esos olvidados en las cunetas. En base a esos tres ejes le planteamos a Curt una escenografía que está muy en la línea de lo que teníamos en la cabeza y que Juan, al principio de todo, en el texto ya tenía una idea de por dónde tenía que ir el asunto.

Ese espacio que transmitieron a Curt, Sergio  lo define como un espacio que denomina, "muy Mencheta".

Es un espacio en evolución, pues siempre necesito que el espacio evolucione y que empiece  lo más sencillo posible. En este caso la escenografía es una herramienta de la puesta en escena y en este caso rotunda. Yo necesitaba meterle mucho aire al propio relato. Poder respirar. Sabemos cómo termina la historia y también lo dice desde el principio como  línea argumental: Lorca va a contar todas las decisiones que fue tomando, para que aquella noche de agosto de 1936 lo fusilaran. Desde el principio es una película de miedo. Tanto la escenografía como la puesta en escena y la luz, que al principio nos costó encontrarla  ya que no queríamos que fuera la de Crónica de una muerte anunciada, sino que pudiéramos respirar, y mostrar ese momento lleno de luz y creatividad brutal como fue la República en España. Buscábamos mostrar esos momentos como cuadros. Es una escenografía orgánica, es decir había que ensayar con ella. Se necesitaba que Juan-Lorca tuviera los elementos, y que aparecieran y no estuvieran allí desde el principio.

UN ESPACIO VACÍO QUE SE
VA LLENADO DE ELEMENTOS

Se parte de un espacio vacío que se va llenando de la historia de España de ese período.

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  CURT ALLEN WILMER
FOTO: ACADEMIA ARTES ESCÉNICAS

Ese espacio nos va llevando a un ejercicio de memoria, y  mi pretensión es que el espectador en cada uno de esos episodios pueda imaginar ese día de la conferencia en Fuentevaqueros, al lado de ese paisano con el que Federico tiene una conversación ficcionada, pero estamos entre cajas, así como en otro momento estamos en una plaza de Castilla a las dos de la tarde. Lo que más me atrae de todo esto es que son cuatro elementos y el espectador está haciendo la mitad del trabajo. Además la historia de Federico se presta a hacerlo con muy poquita cosa, y no por economizar medios, sino por todo lo contrario: por sacarle el mayor partido y cada elemento que salga tenga un sentido dramatúrgico. Todo se reutiliza mucho transciendo el sentido de los elementos y se convierte en algo más simbólico.

Juan Diego precisa que el espacio es crucial, ya que cuando se habla de monólogo el espectador imagina algo intimista  y

nosotros queríamos ofrecer un espectáculo de gran formato y en eso la escenografía juega un papel que partiendo de la nada, de un espacio vacío, se va construyendo o deconstruyendo  en todo un espacio. La escenografía y las luces son varios personajes más que van llenando el espacio y la función. Nos acompañan ampliando el relato.

UNA PREMISA DE CONCEPTOS

Por otro lado  la escenografía responde también a lo que Juan llama una premisa de conceptos. A este respecto Juan recuerda la  obra de Federico García Lorca, El público, escrita en Cuba y que nunca se llegó a estrenar estando Lorca vivo.

Es una de sus piezas más crípticas. Entre otras cosas, es una obra en que habla claramente de su homosexualidad, y quizá por eso tuvo ese resquemor de cómo iba a ser recibida.  Una cita muy famosa de esa obra es "la necesidad de hacer un teatro bajo la arena para conocer la verdad de las sepulturas". Yo quise resignificar esa frase porque me parecía muy pertinente traída a hoy, y la referencia es cristalina: "Hacer un teatro bajo la arena para conocer la verdad de las sepulturas", hablando de un poeta que a día de hoy seguimos sin saber dónde está enterrado. "Seguimos sin saber la verdad de su sepultura",  que es emblema de miles de otros que están en la misma situación, repartidos por la cunetas de España, pues queríamos jugar con esa metáfora de un teatro bajo la arena, y ese es el arriba y el abajo al que se refiere Sergio. También ese teatro bajo la arena y conocer la verdad de la sepultura implica rasgar esa cuarta pared. Salir del teatro y conocer la verdad.   

Otra frase fundamental para este montaje fue la cita de Comedia sin título, obra inacabada y para Juan Diego "magnífica", que está al comienzo de la función cuando el director anuncia que va a cancelarla obra.  

Se pregunta si es posible "traer el olor del mar a un teatro" o si es posible "llenar de estrellas el patio de butacas". Es decir está diciendo "si es posible traer la realidad a la escena". Esa es otra premisa que está presente durante toda la función: si es posible hablar, representar lo que está ocurriendo fuera, dentro de un escenario.  Eso no solo nos inspira la escenografía, sino que es nodular a lo que cuenta la historia.

LA ACTUALIDAD DEL LORCA DE 1936
¿TEXTO DENUNCIA?

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JUAN DIEGO BOTTO  
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JUAN DIEGO BOTTO
FOTOS: marcosGPunto
 

A pesar de esta inspiración en las metáforas lorquianas mencionadas Juan Diego advierte que la obra es muy cristalina y nada críptica, y la comparaciones con la actualidad no hay que forzarlas. Como ejemplo pone su período de la compañía La Barraca que lleva por España.

Muchos medios de comunicación lo acusan de vivir de las subvenciones; de vivir del erario público; de pegarse grandes cenas con el dinero del Ministerio de Instrucción pública; de que estaba ganando fortunas a costa del dinero de los españoles… etc. Este es un ejemplo de cosas que pasaban entonces y que si lo digo en la función, parece que me lo estoy inventando, porque es algo que se sigue diciendo de los cómicos hoy en día. Como esto muchas otras cosas. A Lorca le tocó vivir un momento de cambio social en los años 20 pero fundamentalmente los años 30, que fue de un cambio brutal, en España y en toda Europa, pero  en España de forma significativa. Cambiaron las estructuras políticas, económicas, culturales, estéticas y las decisiones que fue tomando ante eso, le llevaron hacia un lugar que se convirtió en un personaje extremadamente amado por muchos y singularmente odiado por otros. Fue un emblema de lo que una parte de España detestaba

Con este enganche o paralelismo con la actualidad, el texto podría encuadrarse en lo que se ha llamado "texto denuncia". Para Juan Diego Boto no es la expresión adecuada, porque  "denuncia" tiene una serie de connotaciones nos llevan a un lugar. Por  el contrario

la pieza tiene en los dos primeros actos la enorme alegría que tenía Federico. Están escritos desde ese lugar del sentido del humor, de luminosidad, que todos señalan que tenía Federico. Es evidente que el tercer acto no es así, y es como Crónica de una muerte anunciada, donde el espectador se sienta en una butaca sabiendo que el protagonista va a llegar a un 18 de agosto del 36 en el que lo van a fusilar, pero hasta llegar a ese momento tratamos de aportar mucho sentido del humor. La función es muy juguetona, muy lúdica, muy luminosa. No obstante sí está la voluntad de expresar un punto de vista sobre aquella realidad y la nuestra.  Es un punto de vista que no sé si es crítico…, bueno, sí es crítico. Evidentemente hay muchas cosas que han mejorado. Cuando hablamos del final de Lorca halamos de la peor etapa que ha vivido el país. Estamos hablando de un Golpe de Estado, estamos hablando del auge del fascismo, estamos hablando de una guerra civil a la que siguieron 40 años de dictadura. Es indudable que ahora vivimos en una democracia y por hostil que sea el ambiente en el que estamos, no es un ambiente en el que podamos decir: "estamos  en los umbrales de una guerra civil". No, no lo estamos. Es evidente que estamos mejor. ¿Estamos estupendamente? ¡No!, pero mejor ¡Sí!

¿POR QUÉ FUSILARON A LORCA?

  LORCA
  FEDERICO GARCÍA LORCA
FOTO: ARCHIVO

Se ha buscado en todos estos años, la razón de ser de su fusilamiento. Se le ha presentado como instigador político, venganza personal por su relaciones homosexuales con un joven, y otros  lo despolitizan ya que era simplemente un artista. Juan Diego recuerda que todas sus entrevistas, conferencias y charlas están publicadas y cualquiera puede acceder  a ello.

Lorca ha hablado de muchas cosas. Mucho fundamentalmente de teatro, de arte, de poesía, de la función que debe cumplir el arte, de cómo debe ser el teatro, la poesía… Además también sus gustos fueron cambiándose y modificándose con el tiempo. También es cierto que en los últimos años fue adquiriendo un compromiso con distintas cuestiones de la actualidad que fueron ganándose la simpatía de un sector de la sociedad, y las enemistades de otro sector de la sociedad. No descubro nada que no sea evidente: se vinculó con la Segunda República, La Barraca fue un encargo Fernández de los Ríos, un encargo de la República que él lleva adelante; firmó manifiestos atacando la dictadura de Salazar; criticando encarcelamiento de presos  alemanes por parte de los nazis; fue muy crítico con el nazismo y con Mussolini y no sólo por firmar manifiestos contra Mussolini, sino porque uno de mis poemas favoritos que es Grito hacia Roma de Poeta en Nueva York es una crítica al  Papa de Roma por haber apoyado a Mussolini en su invasión de Abisinia. En resumen mantuvo unas posiciones  y no se mantuvo al margen de lo que sucedía alrededor

Sergio añade al tema de la denuncia que Lorca

era un artista que estaba permanentemente denunciado. Incluso tiene poemas en que ya en el título está la palabra "denuncia". Era un tipo muy comprometido con su tiempo,  pero  en ningún momento hay una denuncia directa de lo que esté pasando hoy. Sí hay un paralelismo, pero basándose en las conferencias y entrevistas, donde, unas veces directa y otras indirecta la mayor parte de las veces, sí hay una denuncia de lo que está sucediendo.

Aunque por parte de Lorca existe esa denuncia, Sergio advierte que Lorca no se lo ve venir, lo cual se confirma en una entrevista del último año en que le preguntan: ¿Por qué ha firmado la candidatura al Frente Popular? y responde que

"en esta época no se puede ser neutral. Si no ganamos ya podemos despedirnos de nuestra España. Nos echarán, si es que no  nos matan". Indudablemente algo había en el aire - recuerda Juan Diego.

EL TEXTO ORIGINAL BORRA LOS LÍMITES
ENTRE LORCA Y JUAN DIEGO

El texto es original de Juan Diego, pero lleno de referencias, fundamentalmente, a charlas, entrevistas, conferencias de Lorca

El material suyo que hemos cogido, más allá de alguna referencia a algún poema, a alguna obra de teatro, que son líneas sueltas, la esencia recogida está en charlas, entrevistas, conferencias …, porque nos habla más de su persona, del punto de vista del mundo, que de su obra literaria.   

Esta personalidad de Lorca la relata Juan Diego en primera persona porque encarna a Lorca.

Voy contando distintos aspectos de mi vida, con lo que se intenta responder a la pregunta de "¿Porqué me fusilaron? Os voy a contar algunos momento de mi vida que quizá ayuden a responder a esa pregunta?"   

Yo no conocía las entrevistas, las conferencias … salvo algunas cosas, pero no estaba metido en esto como Juan que llevaba muchos años y para el que Lorca es un compañero de vida - interviene Sergio Perez-Mencheta.  Cuando ya me llega el texto, le pedí que me subrayara "qué partes eran de Federico y qué partes eran de Juan Diego Boto", porque estaba convencido de que tal texto era de Boto y era de Federico palabra por palabra en el año 1934 o en el 1932. Era un texto que perfectamente lo podría haber dicho Juan Diego Boto, yo o por quien fuera hoy en día por cómo está la situación…etc. Esto me pareció interesante de partida: no sabemos en qué momento está hablando Juan y en qué momento está hablandoFederico. Este es uno de los puntos fuertes de la función.

UNA OBRA SOBRE UN DESAPARECIDO

Al terminar el texto y ya entrados en faena escénica, Sergio pidió a Juan Diego que le escribiera en un folio el "¿Para qué lo cuentas?".

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JUAN DIEGO BOTTO
FOTO: marcosGPunto
 

Yo estaba muy orgulloso porque había escrito una obra que se alejaba de mi teatro anterior: no estaba hablando de la dictadura argentina, no estaba hablando  de exilio; no estaba hablando de un desaparecido. Al escribir me di cuenta, de lo que no me había dado cuenta: estaba escribiendo una obra de un "desaparecido". Sobre un hombre que fue sacado de su casa, fusilado extrajudicialmente, y su cadáver hecho desaparecer, y que todo el sentido de la obra tiene que ver con la memoria. La función es una obra sobre la necesidad y la importancia de la Memoria. Ahí me di cuenta de que, en realidad, llevo toda la vida escribiendo sobre lo mismo. Entonces el por qué escribí esta obra y no hice Comedia sin título, tiene que ver con que me gusta hablar de ciertos temas. Uno tiene los temas que le obsesionan en la vida y, más o menos, ronda alrededor de esos temas en casi toda su obra. Hablar de la impunidad, hablar de la memoria, de la justicia son temas que están en mí o la necesidad de tratarlos. 

MONÓLOGO EN TRES ACTOS

Sergio desde el principio ha hablado de monólogo, no obstante, al profano, sorprende que se hable de una función en tres actos. Sergio aclara que en realidad es un modo de hablar al interno para aclararnos. Juan Diego precisa

la obra va toda de un tirón.  Es como dice Sergio, un tobogán en el que te subes y acaba, pero, para mí la pieza tiene tres partes que el espectador no nota, pero nosotros hicimos esa división…

Yo necesito una estructura - precisa Sergio.Juan es caótico en su creatividad, y el chorizo que me mandó… Escribiendo en el ordenador es de los que todavía, cuando se le acaba la palabra hace un guión, y continúa. La función eran 25 páginas todo en un bloque. Una obra de 1 hora y media larga. Mi pregunta era ¿cómo estructurarlo? Lo intenté varias veces y al final le dije: "Juan, necesito una estructura", y fue una de las claves de cómo contar la historia. Incluso hay muchas cosas que se  cambiaron de lugar gracias a encontrar la estructura. Era un borbotón de ideas, citas…todo maravilloso, y éste era uno de los problemas que teníamos: Lorca era genial. Aunque no es lo mismo como referencia pongo Friends que la estoy volviendo a ver con  mis hijos, que la ven por primera vez. Es increíble, pero hay una risa cada 20 segundos. Aquí pasaba lo mismo, hay citas y frases que eran para enmarcarlas. Entonces teníamos el problema de que  "respirara el texto". Que el texto no fuese una sucesión de frases magistrales. Quitamos mucho y le dimos juego y movimiento para que no fuera una sucesión de conferencias, o el de que una persona sale y no deja de decir genialidades.

De hecho - añade Juan Diego -, me pasó en la escritura, como también me pasó en la obra anterior, que una vez terminada, las dos partes que tienen más sentido del humor fue lo  último que escribí. Con ello se intenta dar ese brillo que todo el mundo dice que tenía Lorca.

El monólogo también queda aireado al interpretar Juan Diego varios personajes conjuntamente en escenas a dos o a tres, que son totalmente originales y que Sergio califica de maravillosos.

LA VOZ DE FEDERICO

Federico era de Granada, cuyo acento es muy característico dentro de Andalucía, donde cada provincia tiene su propio acento, que no es el "andalú" al uso en el mundo audiovisual. Aunque se sigue investigando en archivos sobre la posible voz de Lorca, hasta el momento no se conoce. En Una noche sin luna se ha planteado si utilizar un hipotético acento  o no. Sergio es rotundo:

Yo descarté el acento desde el principio, pero como una necesidad mía par poder contar la historia, porque a mí lo que más me atrae es que no sé, como he dicho, cuando habla Federico o cuando habla Juan. Cuándo es Federico hoy, y cuándo es Federico ayer. Si le metemos acento eso se pierde evidentemente. Esto es lo que me  resulta apasionante.


SOBRE LA ESCENA: NUESTRO FEDERICO

Sergio aclara que el Federico que vemos no es el de la memoria colectiva. Es el parido por todo el equipo artístico.

Es nuestro Federico, con toda la humildad y respeto a Federico. Es el que hemos imaginado nosotros para contar esta historia, el que necesitábamos y que se ha ido forjando a medida que avanzaba la función. La escenografía ha ayudado mucho a forjar ese Federico.

En palabras Juan Diego:

He querido ver a Lorca no como un poeta celebrado y laureado, homenajeado y representado, sino como a un hombre de la cultura de nuestros días. No como al referente más internacional de la cultura española del siglo XX, sino como a un joven poeta que buscaba simplemente la manera de hacer buenas piezas artísticas y mejorar, como podía, la España de su tiempo que tanto amaba. Con mucha ironía, emotividad y sentido del humor, el autor va relatando su paso por la Residencia de Estudiantes, las críticas recibidas por Yerma, su experiencia en La Barraca, su relación con la prensa, sus amores, la tensión de sus últimos años… Con todo ello nos acerca a temas como el papel de la mujer, bajo su mirada siempre poética y reivindicativa, la necesidad de la libertad artística y de expresión, la lucha por la identidad sexual o la importancia de la memoria y las raíces.

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JUAN DIEGO BOTTO / SERGIO PÉREZ-MENCHETA
FOTO: MarcosGPunto

LA MIRADA DE SERGIO PÉREZ-MENCHETA
SOBRE JUAN DIEGO BOTTO

A diferencia de otros montajes que dirijo, con Juan me pasa algo particular. Cuando me atrae un proyecto y me meto en él, siempre es un proyecto que nace de mí. Nunca es un proyecto que nace de otra persona. Con Juan siempre nace de Juan. Entonces lo apasionante es que el 80% de la puesta en escena nace de los ensayos. No está preconcebida y  no voy con prisa. Era relativamente fácil ya que el autor estaba en los ensayos también. Eso ha sido enriquecedor, porque confías ciegamente en que vas a trabajar con un amigo con el que te entiendes. Para mí, Juan, y esto es muy subjetivo,  ahora mismo es uno de los mejores actores de este país. Entonces ha sido muy fácil. Juan es muy trabajador. Xenia, mi ayudante de dirección, y yo nos íbamos de la Sala Mirador, después de 5  horas de ensayo, a ensayar lo otro y Juan se quedaba. Cuando llegábamos Juan ya estaba hacía un rato y luego se quedaba para hacer un repaso de todo lo que habíamos trabajado. Juan podía trabajar él solo unas 7 horas. Cuando hay un elenco más numeroso, ensayar 6 horas es más llevadero y lo dice un actor como soy yo, pero cuando está solo…Pues Juan ensayaba solo 7 y las que hiciesen falta.  

FUNCIÓN
De martes a domingo: 19:00 h.
Teatro Accesible
viernes 25 de junio 

PRECIO
De 22 € a 4,50 € 

DESCUENTO GENERAL DEL 25%
Días del espectador: martes y miércoles.
Menores de 14 años, Grupos a partir de 20 personas.

DESCUENTO DEL 20%
Mayores de 65 años, Desempleo, Discapacidad, Silla de ruedas y acompañante, Familias numerosas.

ENTRADA GRATUITA
Jóvenes entre 16 y 26 años inscritos en el JOBO.
Solo en las sesiones de martes a viernes, si hay aforo disponible. 

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  JUAN DIEGO BOTTO / SERGIO PÉREZ-MENCHETA
FOTO: www.madridteatro.net

Título: Una noche sin luna
Texto: Juan Diego Botto
Escenografía: Curt Allen Wilmer (AAPEE), con estudiodeDos
Iluminación: Valentín Álvarez (AAI)
Vestuario: Elda Noriega (AAPEE)
Espacio sonoro: Pablo Martín Jones
Música original: Alejandro Pelayo
Atrezzista: Eva Ramón
Ayudante de iluminación: Raúl Baena
Fotografía de escena: MarcosGPunto
Ayudante de dirección: Xenia Reguant
Una coproducción de La Rota Producciones, Barco Pirata Producciones y Concha Busto Producción y Distribución.
Intérprete: Juan Diego Botto
Dirección: Sergio PerisMencheta 
Duración: 1h. 40 min.
Estreno en Madrid: Teatro Español (Sala Principal), 17 - VI - 2021

 
Más información
         
 
José Ramón Díaz Sande
Copyright©diazsande

 

 
Teatro Español
Directores: Natalia Menéndez/ Luis Luque
Aforo: 760
C/ Príncipe, 25
28012- Madrid
Concejalía de las Artes
Ayuntamiento de Madrid.
Tf. 91 3601484
Metro: Sevilla y Sol
Parking: Pz. Santa Ana,
Pz. Jacinto Benavente y Sevilla.

http://www.munimadrid.es 

Última actualización el Jueves, 17 de Junio de 2021 14:25