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JUICIO A UNA ZORRA
DAR NUEVA VOZ A HELENA DE TROYA
Juicio a una zorra vuelve al Teatro de la Abadía. Su anterior fugaz paso por este Teatro, y el entusiasmo de crítica y público, así como su candidatura a los Premios Max de las Artes Escénicas, algo a lo que Miguel del Arco su autor está ya acostumbrado: La función por hacer - versión libre de Seis personajes en busca de autor de Luigi Pirandello - en 2011 y Veraneantes - versión libre de la obra de Máximo Gorki - (CLICKEAR) en el 2012, han colaborado a que vuelva. Este monólogo interpretado por Carmen Machi y La Función por hacer cierran la temporada del Teatro de la Abadía.
· Es un privilegio para mí el que se cierre con estos dos títulos míos - confiesa Miguel del Arco. Ambas guardan una estrecha relación con esta casa. José Luis Gómez- director artístico del Teatro de La Abadía - vio La función por hacer y nos animó a poner en marcha Veraneantes. Sin su apoyo no hubiéramos podido prorrogar Juicio a una zorra, más allá de las cuatro representaciones encargadas por el Festival de Mérida.
HELENA DE TROYA, SE JUZGA A SÍ MISMA.
Juicio a una zorra pretende cambiar el punto de vista de la Historia, por aquello de los hechos históricos se narran, según "quien escribe la historia", leiv-motiv en boca de la propia Helena teatral.
· Helena de Troya, una de las mujeres más famosas de la historia - aclara Miguel del Arco - y, posiblemente, una de las más vilipendiadas, relama el derecho a elegir las palabras que narren la historia. La fuentes literarias proceden de tres acotaciones literarias. Georgias de Leontini-(485 a. C.-380 a. C.), filósofo del período antropológico de la Filosofía griega - a partir de su Helena, y dos fragmentos de la Ilíada. Fue un encargo del Festival de Mérida, en la sección de Monólogos de personajes secundarios, en el contexto del teatro grecolatino. Me dieron a escoger el personaje. Se me cruzó el de Helena, tal vez por lo que tenía que ver con Lucrecia (CLIKEAR), tras la violación de Tarquino, que había adaptado y dirigido para Nuria Espert. Ve un cuadro y Shakespeare describe el sitio de Troya y habla de la "perra" Helena. Alude al mostrar su belleza y pide que se pueda destruir su belleza. Ese pasaje en mi versión de Lucrecia, está muy recortado. Otro elemento sacado de la Ilíada es el "vino". Helena busca a su padre tras volver a Esparta. Le da a su padre el vino con una fórmula egipcia, una polvo de ambrosía, que hace que no sufra dolor durante un día entero. A partir de ahí surgió un personaje que no había tenido voz en la narración histórica y que se me ocurrió al pensar en Carmen. Es más, no comencé a escribir el texto hasta que Carmen aceptó interpretarla. Por eso está escrito para ella. Con este personaje planteo el tema de la guerra de la que se culpabilizó a Helena, cuando la relación de Helena y Paris fue un acto de amor.
· Fue un espectáculo muy importante en mi vida, pues comencé mi carrera teatral. Desde entonces han pasado 20 años y no me lo parece, pues disfruto igual que entonces- reconoce Carmen. La profesión me ha regalado tantas cosas... Pero este espectáculo es muy particular para cualquier actor al ser un monólogo. En un obra con varios personajes uno da el pie- palabra o gesto para que el otro actor intervenga - al otro. En el monólogo tú misma te tienes que dar el pie, que no es de texto. En el caso de Helena es de tipo emocional.
CARMEN AGLUTINA DOS TIPOS DE PÚBLICO
Juicio a una zorra lleva mucho tiempo en rodaje. A estas alturas ha conseguido las 200 representaciones por toda España y, siempre, llenando las salas. Carmen Machi ha conseguido combinar el público adicto al teatro, y aquel otro adicto a las series de televisión: Siete vidas y Aida. Se puede barruntar que la recepción de la obra puede ser varia.
· Tras todo este recorrido tenemos bastante información con respecto al público. En todos los lugares hemos mantenido un espacio similar al del Teatro de la Abadía, que tienes la cercanía con el público. Este tipo de espacio es el que más me gusta, pues puedes palpar su cercanía. En los distintos lugares en que hemos estado no hemos encontrado una diferencia entre unos y otros. Desde Pamplona a Sevilla reaccionan igual. A lo más se capta el diverso sentido del humor de cada pueblo. Al iniciar el monólogo hay un público entra de un modo más frívolo y otro no, pero a medida que avanza éste manifiesta cierta alegría que combina con silencios. A veces tengo la sensación de que no entienden nada, debido al silencio. No hay ni toses.
Tras todas estas representaciones Miguel advierte que...
· ... el espectáculo es el mismo, aunque se modifica un poco a media que se hace. El rodaje te da más seguridad y eso ayuda. Se va modificando con algunos nuevos hallazgos. El personaje no manda, pues es el mismo, pero sí la actriz y el espacio y el tiempo. Mola el sorprenderse. Para mí, en general, con motivo de la repetición y la creación de los personajes aprendo en la escritura. Todo esto viene con el poso de la actuación y la conversaciones durante la puesta en escena. Esto hace que se cambie el texto y que lo reescribamos. Es un modo de que el texto esté vivo. cuando vi la función, casi no lo reconocía.
HELENA ME INVADE
CON UNA CERVEZITA VUELVO A LA VIDA
Aunque el personaje puede ir progresando, el que se le haya hecho a la medida de Carmen Machi, no quiere decir, según Carmen, que ella se lo coma y se lo beba.
· Miguel es el único director que ve todas las funciones, cuando alguna por motivo de agenda, no puede. Yo no improviso sin consultar. Soy una actriz muy disciplinada. Lo que puede ser cambio en el personaje no es algo premeditado, como podría ser "Voy a hacer esto". De pronto me golpea y me sale otra cosa, pero que no es gratuito. Sobre todo esto me ocurra al estar sola en el escenario y en un texto como éste que no es comedia.
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CARMEN MACHI
FOTO: SERGIO PARRA |
La relación entre personaje y actor es distinta en cada actor.
· En general, los personajes nunca me invaden. Nunca dejo de ser yo. Pero con Helena, debido a la estructura del propio personaje y lo que cuenta, me sucede algo rarísimo. Es la primera vez que me invade, que me afecta, algo que he rehuido como actriz desde que comencé a los 17 años. Me deja hecha polvo por dentro. Por fuera termino como un Cristo. Desde el primer día y con poco ensayo sentí como un "crack" (chasquido) en mi interior y esto lo vimos tanto Miguel como yo. Desde ese día no me bajo de ese nivel. Algo extraño para mí. Trabajas con las emociones del personaje y no con las tuyas. hay actores que para transmitir esas emociones, necesitan imaginarla en su vida , por ejemplo recordar a un hombre murto que les ha impresionado... Yo no. No aplico mi propia vida, porque en Helena es imposible. El dolor y amor de Helena lo reconozco, pero toras emociones en otros momentos no. Ella me lleva a un lugar como si se encarnase en mí. Entra de modo de crear una situación que me atiza bien. Al terminar la función soy como una ameba: Me siento taladrada y no sé por qué. No sé si esto enriquece al personaje, pero no es premeditado. Mi primera vez que lo experimenté en el camerino, me encontraba muy mal. No obstante, cuando salgo me toma una cervecita y vuelvo a la vida.
· Sí que lo enriquece - añade Miguel -, lo vivo yo y he visto cómo el público se emociona. Es importante el "feed-back" directo en el encuentro con el púbico. Compruebas que la gente se emociona.
Aunque en formato a la italiana - frente al público -, según Carmen:
· el espectáculo rompe la Cuarta Pared, pues hablo con el público y lo reclamo. Con esto el camino está medio hecho y es muy gratificante. Se tiene una sensación de comunión con el público. Es muy chulo. Quieres ser juzgada por el público. Cuando lo hemos representado lejos del público me incomoda más.
UNA HELENA QUE ACUSA EL PASO DEL TIEMPO
Lo que caracterizó a Helena fue su espléndida belleza. La Helena de Miguel ha llegado al deterioro, siguiendo la observación de Hécuba en Las Troyanas: "Helena envejece tarde, pero de repente".
· Helena ha llegado a su final - recuerda Miguel. Quiere dejar de existir, incluso en la imaginación de la historia. Constata el deterioro del paso del tiempo. Quiere eclipsarse. Volviendo a Gorgias en su Elogio de Helena, él dijo "la palabra es un poderoso soberano, que con un pequeñísimo y muy invisible cuerpo realiza empresas absolutamente divinas". En efecto, este "poderoso soberano" ha repartido más inmortalidad entre los mortales que el propio Zeus. Hombre y mujeres, reales o no, que vivirán eternamente conformados por un imperecedero ADN de palabras. Pero pasa a menudo que la palabras que dan forma a estos seres no son de su agrado. Todos sabemos que la historia depende de quién la cuente. Nosotros hemos querido cambiar el punto de vista: Helena de Troya, una de la mujeres más famosas de la historia y, posiblemente, una de las más vilipendiadas, reclama el derecho a elegir las palabras que narren su historia.
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CARMEN MCHI
FOTO: SERGIO PARRA |
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