El malentendido. Camus. Cayetana

Eran épocas en que autores foráneos de dudosa ideología los leíamos a través de traducciones argentinas y de tapadillo. Sartre, Camus y demás se conseguían representar en "petit comité" en facultades de Filosofía o n círculos privados.

Aún faltaban unos años para que las ventanas españolas se abrieran totalmente, no obstante, en 1969 Adolfo Marsillach dirige a Gemma Cuervo, Fernando Guillén - recientemente fallecido -, María Luisa Ponte y Alicia Hermida. Se estrenó en el Teatro Poliorama de Barcelona.

Ahora vuelve de la mano de la hija de ambos : Cayetana Guillén Cuervo. Las motivaciones para volver al texto de Camus (Mondovi (Argelia), el 7 de noviembre de 1913), por parte de Cayetana, quiere ser un homenaje a su padre y cumplir una recomendación que le daba:

· Revisa esta obra, porque es muy oportuna. Mi padre, débil y enfermo me pasaba el texto, estando en el hospital, a pesar de su debilidad. No lo olvidaré nunca. Acabo de vivir una situación personal muy dura, preguntándome cómo Dios puede...siento la misma rabia que mi personaje y me cuestiono la presencia de Dios. Tal cuestionamiento me lleva al tema de la incomunicación que creo es el primer foco de problemas y esencia de El malentendido.

· que estrenaron a Camús o a Sartre en plena dictadura, cuando estrenar este tipo de obras era arriesgado. Quiero dedicárselo a toda una generación que nos está dejando huérfanos a todos. He obtenido de los herederos del legado de Albert Camus el derecho exclusivo para representar El malentendidoen España. Además quiero conmemorar el centenario del nacimiento del Premio Nobel de Literatura francés que se cumple el próximo año, para plantear un interrogante a la sociedad.

De esa generación es Julieta Serrano (la Madre), que ha cumplido 80 años y que antes de que Pedro Almodóvar la tomase como una de sus chicas, ya había pateado mucho teatro y teatro de compromiso.

· Soy de esa generación y me siento muy cercana a aquellos años de lucha y esperanza que tanta falta hacen ahora, en estos agrios momentos claustrofóbicos. El Malentendido es una obra que sacude al ser humano. Toda la esencia de Camus está en esta obra: la confusión del alma humana, la necesidad de realizar los sueños, la búsqueda de la felicidad pero también a través de una ética, de una moral.

En 1944, con una Francia ocupada por el ejército nazi y poco antes de la entrada de los aliados para liberar a Francia, la española María Casares - hija de Casares Quiroga que vivió en Francia desde el exilio de su padre tras la guerra civil española - estrenaba en el Théâtre des Mathurins en París. No resultó indiferente ante el contexto que se representaba. Hubo disensión y pateos por una parte del público y la prensa colaboracionista. A pesar de todo María Casares salió triunfadora y heroína de aquella representación. Más tarde el propio Camus, ante la reacción de aquel público afirmó: El malentendidoha sido rechazada por la mayoría del público. Eso se llama fracaso. A raíz de este estreno Albert Camus unió su vida sentimental a la de María Casares.

El malentendidoes un libreto de Albert Camus para el teatro, con el esquema clásico de una tragedia - declara Cayetana. El autor incluyó esta pieza en lo que llamó ciclo del absurdo junto con El extranjero, Calígulay El mito de Sísifo. En esa trilogía reflexionaba sobre lo absurdo de la condición humana. Porque en El malentendidoestán todos los grandes temas camusianos: la ausencia de dios, la soledad del ser humano, la añoranza de un lugar en el Sur donde el mar y el sol gobiernan implacables sobre todas las cosas, la paralización de los sentimientos que permite continuar viviendo en un mundo hostil, la condena.

El malentendido se basa en un hecho real. Camus se siente impresionado y como hombre de teatro que es comprende las posibilidades escénicas de la historia. Escribe la obra y la estrena.

Jan regresa a su casa veinte años después de haberlo abandonado. Viene casado y con su mujer María. Decide no identificarse porque quiere que lo reconozcan por sí mismo. Llega a su casa que es una pensión regentada por su madre y su hermana Marta. Piden alojamiento. La pensión tiene una peculiaridad: madre y hermana asesinan a los huéspedes para apoderarse de sus bienes. Ellas no le reconocen y este malentendido tendrá un precio muy alto.

· Sobre ese malentendido, el espectador se adelanta para reflexionar sobre un mundo donde la moral ha desaparecido y se ve obligado a recomponerla de nuevo a toda prisa, durante la función, teniendo en cuenta los sentimientos y circunstancias de los personajes. A crear una nueva ética para poder seguir viviendo fuera de la sala. Es una reflexión muy actual. El hecho de que un personaje marginal precipite como el eje sobre el que gira la función –y el mundo – le da al final una vuelta de tuerca –reveladora– de gran intensidad. Dice uno de los personajes principales: "La vida es más cruel que nosotras", y ese nosotras son aquí el teatro y la ficción - añade Cayetana.

Quien dirige este montaje es Eduardo Vasco - antiguo director de la Compañía Nacional de Teatro Clásico -, el cual celebra que Cayetana haya tenido...

· ... la preciosa idea de juntar un equipo de trabajo para montar esta obra de Albert Camus y nos fascinó a todos con su energía y su pasión, de tal manera que nos embarcamos e hicimos nuestro el proyecto, y nos pusimos manos a la obra con este texto. Camus marca una generación con su manera de escribir, cruda y poética, y propone un teatro que deja en el aire cuestiones de una trascendencia dolorosa en aquel momento. Hoy al volver a escuchar sus obras asusta lo trascendentes que siguen siendo dichas cuestiones a través de la óptica de este autor; debe ser eso de la universalidad o la actualidad que muchas veces se menciona sobre tantas obras…

· comprende uno que la mayor parte de las veces se banaliza cuando se habla de la actualidad de un texto, y que lo importante, a la hora de la verdad, es esa inexplicable intensidad, esa extraña belleza que nos atrapa y nos transforma haciendo del tiempo transcurrido una ventaja, más que un inconveniente. Y es que el tiempo es, al fin y al cabo, un aliado. Una vez escuché a un actor, ya anciano, que no hay más que mirar atrás para entender qué es lo que hace uno en esta profesión, y yo, que cada vez miro más hacia atrás, no dejo tampoco de mirar alrededor, porque tengo la sensación de que así lo entiendo todo mejor.

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TEATRO VALLE INCLÁN
(Polivalente)
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