Carnívoros. Muacateatro. Crítica Imprimir
Escrito por José R. Díaz Sande   
Martes, 15 de Mayo de 2012 09:03

CARNÍVOROS

ME ALARGÓ EL FRUTO Y LO COMÍ

 

 
 BORJA SÁQNCHEZ /BELÉN lÓPEZ-v / LAURA HERNÁNDEZ /
ENRIQUE ASENJO
FOTO: MUACATEATRO

Desde que Adán mordió la manzana la vida humana se complicó muchísimo, con respecto a todo, pero en concreto con respecto al amor. Por cierto, que resulta un tanto infantil y poco caballeresca  la poca delicadeza de Adán cuando pillado "in fraganti"  sólo se le ocurre decir: "La mujer que me diste por compañera me alargó el fruto y lo comí" (Génesis 3,12). En la  tradición se ha identificado ese fruto con la "manzana". Y este símbolo es el que ha tomado el colectivo Muaca teatro que interpreta Carnívoros para su mensaje publicitario. Una manzana con demasiados bocados promiscuos.

 

No voy a desvelar todo el entramado, para no destripar lo que forma parte de la intriga que hace que vayamos de sorpresa en sorpresa. Sí, se puede adelantar que se trata de dos parejas jóvenes que se reúnen para celebrar la subida de sueldo de Enrique, un extrovertido, de vocación "clownesca" y un tanto "salidillo", que convive con Silvina, joven avispada que no hace ascos a eso del amor, llamado sexo, pero que tiene que contener continuamente el aquí te pilLo, aquí te cojo de Enrique. La otra pareja es la cara opuesta de esa moneda. Lolo es joven sensato, discreto, delicado hasta apuntar "maneras", que cree en la solidez del amor, cuya pareja es Claudia, de talante reticente en eso del desmelene amoroso, al menos con él. En principio, ambas parejas disfrutan de sus respectivos momentos amorosos, y necesidades físicas. Aquella cena, como siempre suele suceder en muchas reuniones de amigos - una argucia de los dramaturgos que reúnen a sus personajes para que se desprendan de sus máscaras - sirve para que el subconsciente y el consciente salgan a la luz y sorprendan al espectador con dobles vidas.

 

Roel García Serrano, el autor, escribe esta comedia carnívora - los personajes se devoran entre sí - después de otro título Mendigando Amor, y antes de un futuro título: Hablando claro.  Las tres forman un trilogía sobre el Amor. La estructura dramática está compuesta a base de escenas cortas, que abunda en estos últimos tiempos del teatro. Una influencia que se ha dicho proviene del cine y la televisión, y en lo que se refiere a Roel, es posible, ya que posee experiencia en guiones televisivos. Cuando el teatro se consolidó con los tres famosos actos y se comenzó a escribir fragmentario, se acusó de una incapacidad para construir una continuada acción dramatúrgica. Tal acusación olvidaba que los clásicos: Shakespeare, Lope, Calderón etc... escribían por escenas y sin acotaciones. A lo más: una calle, una plaza, un retrete con cortinajes (en la época un saloncito retirado, un retiro)... Actualmente y desde que, entre otros, Arthur Miller nos sorprendió con aquella Muerte de un viajante, contarnos una historia por fragmentos no es tema de poner en duda las habilidades de un dramaturgo. La dificultad está en que esa fragmentación, encuentre su continuidad interna y el espectador no sienta que la historia se la fragmenten o detecte pausas. En este error no cae Roel, que construye una historia fluida, sin tiempos muertos y divertida, a  pesar de la posible tragedia que pueda ir apareciendo.

 

Tanto en lenguaje procaz como en exposición de piel corporal Carnívoros es generosa, pero no más que nuestra sociedad actual proclive a tal "estética". Estos ingredientes divierten al público y pone un punto, a su favor, de recepción. No obstante, tal desenfado es aparente, pues tras esas liberaciones, la historia nos conduce a la ansiedad que supone la búsqueda del amor más profundo, aunque a veces haya que clavar los colmillos y causar desgarros. Carnívoros es una comedia-trágica de gran frescura en los diálogos y situaciones. No hay un momento de bajón y mantiene vivo el interés.

 

Lo más destacable es la interpretación de los cuatro actores, en una coherencia y entendimiento entre ellos. Muaca Teatro es un colectivo que a partir del texto comparten la creación y dirección, aunque Roel lleve la voz cantante. Y eso se nota a su favor, hasta tal punto que no distinguimos entre actor y personaje. Los diálogos y vocabulario están muy bien integrados y nos acercan a esa forma de expresarnos, sobre todo en los jóvenes de esta generación.

 

Cada actor ha encontrado su personaje y lo ha incorporado a su piel con gran naturalidad. Llama la atención la composición corporal de Borja Sánchez en su Lolo. No es un personaje fácil a nivel corporal. Lolo es un heterosexual de delicadas formas en su espíritu y en su forma de mover brazos y piernas. Está en ese límite de cierto amaneramiento sin llegar a la "pluma". Por parte de Borja hay un perfecto control de tales poses, sin caer en lo facilón. En contraste Enrique es de una total desinhibición, que Enrique Asenjo interpreta con gran naturalidad y gracia. Laura Hernando es Silvina y despliega desenfado y simpatía. Belén López-Valcárcel encarna a Claudia, un personaje un tanto distante y con bastante recámara. Belén nos lo hace creíble. Por eso, si algo primordial tiene esta comedia es que los personajes encuentran su actor adecuado, lo cual es fruto de una buena dirección e interpretación personal.

 

El espacio escénico, con bastante de simbólico en el biombo y sofá, de corte minimalista funciona bien para la concatenación de las diversas escenas. Una banda sonora de canciones sobre la temática del amor arropa bien toda la  historia y la ambienta.

 

Carnívoros es una comedia aparentemente desenfadada con respecto al amor-sexo, que nos lleva hacia la búsqueda del auténtico amor, si es que es posible más allá de la mera relación sexual. Esto no quiere decir que haya una moraleja, palabra tabú para la mayoría de los dramaturgos actuales reacios a lanzar sermones con sus obras,  sino que se trata de constatar lo difícil y complejo que es eso de "me alargó el fruto y lo comí".

FOTO: MUACATEATRO

 

 

ENRIQUE ASENJO / LAURA HERNANDO / BORJA SÁNCHEZ
BELÉN LÓPEZ-VALCÁRCEL
FOTO: MAUACA TEATRO

Título: Carnívoros

Autor: Roel García Serrano

Música: Selección de varios compositores por Roel García Serrano

Escenografía: Enrique Caballero

Iluminación: Gerard Cluá

Vestuario: Luis Terán

Diseño Gráfico: Diceño con eñe

Producción: David López

Compañía: Muacateatro

Ayt. de dirección: María Castaño

Intérpretes: (por orden de aparición), Laura Hernando (Silvina), Enrique Asenjo (Enrique),Belén López- Valcárcel (Claudia), Borja Sáncehz (Lolo)

Dirección: Roel García Serrano

Reestreno en Madrid: Pequeño Teatro Gran Vía, 25 - IV - 2012

 

 


José Ramón Díaz Sande
Copyright©diazsande

 

 


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Última actualización el Domingo, 03 de Junio de 2012 11:46