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Arte Nuevo - Un homenaje- Critica PDF Imprimir E-mail
Escrito por Jerónimo López Mozo   
Martes, 23 de Febrero de 2016 08:55

ARTE NUEVO (UN HOMENAJE)
Cargamento de sueños/El hermano

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  CARGAMENTO DE SUEÑOS
MIGUEL ÁNGEL MUÑOZ / GARY PIQUER
FOTO: SERGIO PARRA
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EL HERMANO
MIGUEL ÁNGEL MUÑOZ, GARY PIQUER / ANA CARLOTA  FERNÁNDEZ / ANA FERNÁNDEZ, IRENE POZO
FOTO: www.madridteatro.net

El viernes 9 de enero de 1948 la cartelera teatral madrileña ofrecía varias comedias: Róbame esta noche y Jaimito se casa, de Antonio y Manuel Paso; El señor mayordomo, de Adolfo Torrado; El doctor Faustino, de Luis Fernández Sevilla; Lo que no dijo Guillermo, de Carlos Llopis; y La gloria en cuarto menguante, de Joaquín Calvo Sotelo. El género frívolo ofrecía tres platos fuertes: las revistas La blanca doble, Cinco minutos nada menos y La estrella de Egipto. También había una opereta de Paso, hijo, titulada No me hable usted de señoras. Un producción italiana, Italia exprés, completaba la oferta musical. Los únicos dramas eran Juan José de Joaquín Dicenta, y El anticuario, de Enrique Suarez de Deza. No faltaba un texto clásico: El mercader de Venecia, en el Español, aunque la asistencia estaba reservada a invitados, pues era la representación estaba dedicada a la Cruz Roja. También había circo en el Price y, en las pantallas, arrasaba Gilda.

A las seis y media de la tarde de ese mismo día, el grupo de teatro experimental Arte Nuevo, creado tres años antes, celebraba la segunda sesión de esa temporada representando, en el Instituto Ramiro de Maeztu, cuatro obras cortas Eran Tres mujeres tres, de Alfonso Paso; El hermano, de Medardo Fraile; Cargamento de sueños, de Alfonso Sastre; y Sed, de José María de Quinto. Todos ellos junto a Carlos José Costas, José María Palacio, José Franco, Enrique Cerro y José Gordón Paso, quien se ocupó de la puesta en escena, eran miembros del grupo, todos estudiantes veinteañeros. Su objetivo era, en palabras de Sastre, hacer un teatro que acabara destruyendo el comercial que existía en España. En un encendido poema, este dramaturgo proclamaba que “venimos al asalto de los carcomidos camerinos/ para fumar en ellos los cigarrillos nuevos”. No lo consiguieron, pues en marzo de ese mismo año el grupo se disolvió. De los protagonistas de aquella sesión, todos siguieron vinculados al teatro, excepto Medardo Fraile, que se decantó por la narrativa. José Gordon creó el grupo La Caratula y luego se instaló en Buenos Aires, donde ejerció diversas actividades relacionadas con el mundo de la escena. José María de Quinto siguió compartiendo con Sastre proyectos cada vez más comprometidos políticamente. Cuando tiempo después su actividad profesional le llevó por derroteros alejados del teatro, siguió vinculado a él como ensayista de gran prestigio. Alfonso Paso sucumbió una década después a la tentación del teatro comercial que había empezado combatiendo y se convirtió en el dramaturgo de moda, único que consiguió mantener simultáneamente siete obras en cartel. En cuanto a Alfonso Sastre, jamás abandonó su lucha por un teatro de alcance político y social. Sus ideas, que evolucionaron desde un existencialismo de raíz católica hasta el marxismo, han quedado plasmadas en manifiestos, ensayos teóricos y en su extensa obra.

Como he apuntado, Arte Nuevo no logró cambiar el rumbo del teatro español, pero es un valioso testimonio de la lucha que, contra viento y marea, unos cuantos llevaron a cabo en años poco propicios para cualquier tipo de aventura que cuestionara el orden establecido. No sé si este espectáculo, que, bajo el título de Arte Nuevo, acoge dos de las obras representadas en aquella sesión única del Ramiro de Maeztu, tendrá éxito de público. Es posible que no cuelgue el cartel de "no hay localidades”, pero, en cualquier caso, merecía la pena subirlo al escenario del Español, porque, por encima de todo, hay que valorar, en este proyecto, la voluntad de rescatar del olvido episodios que son parte de nuestra historia.

Las obras elegidas son Cargamento de sueños, de Sastre, y El hermano, de Medardo Fraile. Estamos ante dos piezas muy distintas en su estructura y contenido, pero que, sin embargo, tienen en común que se inscriben en sendas corrientes teatrales que irrumpirían poco después en nuestra escena. No contribuyeron a generarlas, pero si cabe otorgar a sus autores la condición de adelantados, el primero, del teatro de Samuel Beckett y, el segundo, del realismo de Buero Vallejo. En efecto, Esperando a Godot, con el que guarda alguna similitud Cargamento de sueños, llegaría a finales de los cuarenta; y El hermano tiene mucho que ver con Historia de una escalera. Tanto, que Mariano de Paco dijo que la humildísima habitación en que trascurre la acción bien podría ser uno de los espacios interiores de los pisos a los que se accede desde  los descansillos de la obra de Buero.

Cargamento de sueños, definida por su autor como drama para vagabundos, transcurre en una encrucijada cualquiera del viejo continente europeo en la que un rotulo señala el camino de la Eternidad. En ella se encuentran dos hombres cuyos nombres  - Man y Jeschua - y la conversación que mantienen remiten a un teatro existencial de hondas raíces religiosas. El primero de ellos, que yace en el suelo moribundo, ha perdido su fe tras un episodio traumático que ha transformado su vida. El segundo le rescatará de la postración en el que está sumido con estas palabras de resonancias bíblicas: “En verdad, en verdad te digo que esta noche no has estado solo. Mira. Ya empieza a amanecer”. El hermano es una pincelada realista que recoge un fragmento de la vida de una familia modesta en el Madrid de la posguerra, integrada por un matrimonio y sus dos hijos, hombre y mujer. Reunida durante la cena, sus miembros hablan de sus dificultades económicas y de sus preocupaciones y nos transmiten detalles de su resignada y rutinaria existencia.  Pero hay un conflicto en el que intervienen los jóvenes, del que apenas sabemos que guarda relación con la ruptura sentimental de ella con su novio. Es, por lo que vislumbramos, un asunto grave cuyo desenlace nos es hurtado. En una carta que el crítico Ado Marqueríe dirigió a José Gordon, decía de El hermano que se trataba de un buen atisbo o esbozo de retorno a un teatro puramente realista, pero que solo tenía un valor expositivo y que no pasaba de ser un primer acto de una obra más extensa. Y concluía con estas palabras: “Se pinta un buen clima, unos buenos tipos, un dramático problema, pero no se dan soluciones”. Parece fuera de duda que darlas era el propósito del autor.

La puesta en escena de José Luis Garci responde a la condición de homenaje que se señala en el propio título del espectáculo. No se ha caído, pues, en la tentación de actualizar los textos, aunque en el de Sastre han desaparecido los personajes del padre, la madre y otros que no hablan, como el medium, los espiritistas y los hombres indiferentes. Tampoco se ha trasladado la acción a una época distinta y la escenografía reproduce con fidelidad el lugar en el que los autores situaron la acción. Incluso en un afán evocador de los hábitos teatrales de aquellos años, el telón está echado cuando el público ocupa sus asientos y cae al final de cada pieza. También se ha recuperado el descanso y, cumpliendo el reglamento de espectáculos de entonces, se comprueba el funcionamiento del telón metálico contra incendios. Se consigue así recrear el ambiente que reinaba en las funciones de hace setenta años y todo lo que vemos en el escenario nos remite a ellas. La escenografía, otro homenaje a los viejos decorados realistas, está muy bien  iluminada con una luz, en palabras de Garci, de pobres. En un espectáculo en el que los protagonismos están repartidos equitativamente, el común denominador de la interpretación es el equilibrio en el trabajo de todos los actores.

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  JOSÉ LUIS GARCI / MIGUEL ÁNGEL MUÑOZ / ANA FERNÁNDEZ / GARY PIQUER / IRENE POZO / ANA CARLOTA FERNÁNDEZ
FOTO: www.madridteastro.net

Título:Arte Nuevo (Un homenaje)
Diseño de Escenografía:Sebastià Brosa
Colaborador Artístico:José Alberto Sánchez
Composición Musical y Espacio Sonoro:Luis Miguel Cobo
Diseño de Iluminación:José Manuel Guerra
Diseño de Vestuario:Lourdes De Orduña
Asistente de Gestión Artística:Ana Fernández De Cosa
Ayudante de Vestuario:Sonia Capilla
Ayudante de Escenografía:Silvia De Marta
Construcción de decorados:Readest
Realización de vestuario:Sastrería Cornejo
Fotografía:Sergio Parra
Agradecimientos:Joseba Larrañaga y Luis Alberto de Cuenca
Producción:Teatro Español
Ayudante de Dirección:Héctor Del Saz

Título:Cargamento de sueños
Autor:de Alfonso Sastre
Intérpretes:Miguel Ángel Muñoz (Man), Gary Piquer (Jeschoua), Ana Carlota Fernández (Frau)

Pausa

Título:El hermano,
Autor:Medardo Fraile
Intérpretes:EL PADRE Gary Piquer (el padre), Miguel Ángel Muñoz (Pedro),  Ana Fernández (La Madre),  Ana Carlota Fernández (Lucía),  Irene Pozo (Juanita)

Dirección:José Luis Garci
Duración:1 hora y 45 minutos (aprox), incluido intermedio
Estreno en Madrid:Teatro Español (Sala Principal), 18 - II -2016

 


JERÓNIMO LÓPEZ MOZO
Copyright©lópezmozo

 


Teatro Español
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Metro: Sevilla y Sol
Parking: Pz. Santa Ana,
Pz. Jacinto Benavente y Sevilla.


 

Última actualización el Martes, 23 de Febrero de 2016 09:26
 
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